Muere el patrón de un barco que naufragó antes de salir del puerto de Malpica

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira MALPICA

MALPICA DE BERGANTIÑOS

ANA GARCÍA

Es el cuarto fallecido en el mar en Galicia en apenas 24 horas; tres tripulantes lograron salvarse

21 dic 2018 . Actualizado a las 07:38 h.

Sin dar tiempo todavía a digerir la tragedia del cerquero Sin Querer Dos, que naufragó tras doblar el cabo Fisterra en su ruta hacia Portonovo. Sin dar tiempo todavía a dar sepultura a los tres cuerpos que han podido ser recuperados. Y sin dar tiempo a concluir la búsqueda de una posible cuarta víctima del siniestro que ha teñido de luto Cambados, el mar ha firmado otra tragedia en Galicia. Ocurrió este jueves en Malpica.

José Ángel Sanjurjo Láuzara, de 48 años, patrón del Silvosa, un beteiro (embarcación de artes menores que faena con betas) con base en el puerto malpicán, murió al hundirse la embarcación pasadas las cuatro y media de la madrugada del jueves.

El barco, con casco de madera y 12 metros de eslora, salía del puerto para ir a faenar, con cuatro tripulantes a bordo. Se disponía a cruzar la zona de las compuertas, pero algo falló. Todo apunta a que no enfiló correctamente de proa y la fuerte corriente existente en la zona, debido al efecto de embudo que genera, hizo girar el barco hacia babor. La proa impactó contra el muelle y la fuerte corriente provocó que el barco volcara y quedara con la quilla al sol, según las primeras hipótesis de la investigación. Un cuarto de hora después del suceso, el barco empezó a recuperar por sí solo la estabilidad hasta quedar adrizado.

Dos marineros saltaron del barco a tiempo y lograron subir al muelle trepando por la zona de defensas. Un tercero cayó al mar, pero logró salvar la vida tras ser rescatado por otra embarcación. Sufrió una ligera hipotermia, pero no precisó atención sanitaria. El patrón del Silvosa falleció. Su cuerpo fue localizado 40 minutos después del accidente. Para entonces ya se habían cerrado las compuertas para evitar que el cadáver pudiera ser arrastrado mar adentro. Una vez recuperado del mar fue trasladado a una lancha neumática hasta que en el juzgado de guardia de Carballo dieron permiso para llevar el cadáver al hospital para practicarle la autopsia, que determinará las causas exactas de la muerte.

Mientras, marineros de Malpica, con el patrón mayor de la cofradía, Pedro Pérez Martelo, a la cabeza, y voluntarios de Protección Civil se afanaban en retirar los restos del aparejo esparcidos por el agua, además de trasladar el pesquero hasta el carro varadero, donde quedó a la espera de ser reparado. El barco presentaba daños en la zona alta de proa y un boquete en la parte alta de popa.

Un veterano del mar

El trágico accidente causó una gran conmoción en Malpica, donde el fallecido era muy conocido. Dicen de él que era un experto marinero, habituado a salir y entrar por la zona de las compuertas. De hecho, el Silvosa suele amarrar en esta zona más abrigada del puerto malpicán.

José Ángel Sanjurjo Láuzara estaba muy vinculado al mar. «Levaba moitos anos traballando», según confirmó el teniente de alcalde de Malpica, Miguel Fernández Mirás, quien, junto con el regidor, Eduardo Parga, acudieron al puerto tan pronto el 112 dio la alerta. El fallecido pertenecía a una familia armadora. Fue propietaria del pesquero Aryjó, según confirmaron este jueves varios profesionales del mar, cuando su padre, Arturo Enrique Formoso Romero, se jubiló hace pocos años y el pesquero fue vendido. José Ángel se enroló en el Silvosa, propiedad del armador malpicán Emilio Cancela Bouzas.

El Concello de Malpica decretó dos días de luto oficial y las banderas ondearán a media asta. El ejecutivo local, con el apoyo de toda la corporación municipal, suspendió todos los actos oficiales hasta el domingo.

«Quedou agarrotado, quedou na ponte... e xa non o vimos máis»

José Manuel Pardo Pombo, uno de los cuatro tripulantes del Silvosa, relató su versión de lo ocurrido: «Eran as catro e media [de la madrugada] cando saímos para o mar. Había un pouco de mar de fondo e bastante correntía, que nos atravesou o barco. Quedamos encallados e demos a volta. Os compañeiros que estaban na proa subiron polas defensas, eu tiven que tirarme ao mar e rescatoume outra embarcación... Pero o patrón debeu quedar agarrotado, quedou na ponte... e xa non o vimos máis», dijo emocionado.

Por su parte, José Antonio García Montes, Tono, buzo y gerente de una escuela de buceo en Malpica, comentó cómo fue el rescate del cuerpo del patrón del Silvosa: «O suceso foi, mais ou menos, sobre as catro e media da madrugada e a min chamáronme sobre as cinco e cuarto. Baixei pensando que se fóra o barco a pique, pero que non houbera vítimas. Sen embargo, ao chegar ao peirao, a Garda Civil avisoume do que acontecera e tiven que esperar a un permiso do xuíz para poder baixar ao Silvosa». El profesional añadió: «Cando baixamos xa vimos ao pobre home. Estaba dentro do barco, pero fóra da ponte. Non estaba enredado, aínda que si tiña aparello por riba». Cree que el cuerpo no presentaba ningún golpe.