La pelea de Malpica pone en peligro una práctica ilegal, pero permitida
MALPICA DE BERGANTIÑOS
La Guardia Civil investiga la trifulca ocurrida en la zona del martillo hace siete días
16 jun 2017 . Actualizado a las 08:04 h.La pelea ocurrida en la tarde-noche del pasado viernes en la zona del martillo del puerto de Malpica puede tener consecuencias desagradables para los miles de aficionados a la pesca deportiva. Muchos temen que se cierren las dársenas de forma definitiva para bloquear el acceso a todas aquellas personas que no acrediten su condición de profesional del mar. De hecho, este martes por la noche algunos pescadores de calamar explicaron que la intención de las autoridades «é cortar o acceso» para evitar problemas y la proliferación de pescadores deportivos.
En las dársenas de Malpica y Laxe se han instalado hace tiempo barreras para restringir los accesos, aunque no están operativas todavía. Todos los días entran y salen numerosos vehículos de los puertos de la Costa da Morte sin ningún tipo de impedimento.
Pero además, la pesca deportiva es una practica ilegal en las dársenas, según confirmaron en Portos de Galicia. «Hai indicadores que prohíben taxativamente bañarse y pescar en los espacios portuarios». Otra cuestión es que se haga la vista gorda: «Es normal que la gente quiera pasar un buen rato y mientras que no se entorpezcan las labores de los profesionales del mar, se les permite estar allí». Sobre la pelea ocurrida hace ahora siete días, que acabó con tres partes de lesiones y cuatro denuncias ante la Guardia Civil de Carballo y la Policía Nacional de A Coruña, en Portos apuntan a «un problema de seguridad pública, que tendrían que resolver las fuerzas de seguridad». En el ente público dependiente de Mar señalaron que no disponen de medios humanos «para garantizar la seguridad las 24 horas, y mucho menos de noche».
«Son uns depredadores. Collen chipiróns por quilos e sen tallas regulamentarias. E así todos os días»
La Guardia Civil recogió el guante lanzado por la Xunta y ayer confirmaron que han abierto una investigación, que tendría dos vertientes: «Una primera tendría por objeto identificar a todas aquellas personas que se dedican, presuntamente, a la comercialización ilegal de calamar y chipirón y al mercadeo de poteras. Y la segunda, la propia pelea, identificando a sus responsables y los motivos que la originaron. Esto ya está en manos del Seprona y de la patrulla de Seguridad Ciudadana».
Mercado ilegal
De forma paralela, son cada vez más los que aseguraron que detrás de la pelea de la semana pasada se encuentra el mercado de venta de poteras a particulares y tiendas especializadas, además de la venta ilegal de producto. «Son uns depredadores. Collen chipiróns por quilos e sen tallas regulamentarias. E así todos os días», dijo ayer un armador de Malpica, que prefiere mantenerse en el anonimato por miedo a posibles represalias. Porque esa es otra, nadie quiere dar la cara ni decir su nombre. Como apuntó un aficionado que acude al puerto de Malpica, «tenemos familias, trabajos, mucho que perder y poco que ganar».