El derribo del cuarto piso de Rueiro da Praia de Malpica es inminente

Toni Longueira, J. V. Lado CARBALLO / LA VOZ

MALPICA DE BERGANTIÑOS

JOSE MANUEL CASAL

El lunes por la mañana se firmará de acta de replanteo, paso previo a los trabajos

25 jun 2016 . Actualizado a las 20:15 h.

El derribo del cuarto piso del número 21 de Rueiro da Praia de Malpica es inminente. Así lo confirmó ayer el alcalde de la localidad, Eduardo Parga Veiga. Según el regidor, este lunes, a primera hora de la mañana, se firmará el acta de replanteo. Se trata del paso previo a las obras de demolición del inmueble que, con toda probabilidad, arrancarán a lo largo de esta próxima semana, «senón comezan o mesmo luns».

De concretarse la medida, se daría carpetazo a un litigio de 31 años, cuando un vecino de los propietarios del edificio denunció las obras. Todas las sentencias fueron favorables al demandante y todos los recursos presentados por los afectados como por el Concello e Malpica fueron tumbados. Primero por el Contencioso-Administrativo y, posteriormente, por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia y el Tribunal Supremo. Este último órgano judicial rechazó el recurso de queja (el último cartucho legal) planteado por el abogado de la familia, ante una resolución que ya parecía definitiva.

Se trataría de la segunda actuación de derribo tras la fallida el 17 de enero del 2014. Aquel día se paró los trabajos debido a que la empresa adjudicataria había entrado en concurso de acreedores y no pudiera firmar la pertinente acta de replanteo, previo a la ejecución de los trabajos. Todavía continúa en la retina de los malpicáns que acudieron aquella mañana a Rueiro da Praia la presencia de varias patrullas del Servicio de Intervención Rápida de la Guardia Civil, que acordonaron la zona e impidieron cualquier atisbo de boicotear -estaba todavía reciente los disturbios en el barrio burgalés de Gamonal- la orden de derribo del TSXG. Incluso un vecino, que acudió en señal de protesta, fue multado con 100 euros por increpar a los agentes.

Decisión

Por su parte, el alcalde reconoce que «non é agradable ter que firmar este tipo de cousas, pero é o traballo do alcalde porque, de non facelo, estaría prevaricando. As resolucións xudiciais hai que respectalas e nós, como Concello, executalas, neste caso como responsable civil subsidiario». Parga recordó que hubo varios intentos de evitar el derribo, «pero foron todos rexeitados». Dijo que en un primer fallo «obligábase ao derrubamento do terceiro e o cuarto piso e logrouse, polo menos, que soamente houbera que tirar o cuarto piso». El mandatario dejó claro que, ni por su parte ni por el resto del ejecutivo malpicán, hubo inanición en este caso. «Cando chegamos á alcaldía hai cinco anos atopámonos enriba da mesa coa escrito firmado do derrube polo anterior goberno de Malpica. En concreto, polo que era o concelleiro de Obras, Rogelio [en alusión a Rogelio Pereira García]». Y añadió: «Esa é a única realidade. O Concello fixo todo o posible, pero todas as sentenzas foron desfavorables, dende a primeira ata a última. Incluso reuninme co xuíz para saber se a demolición afectada a un piso o aos dous».

Cabe recordar que el motivo de este litigio entre el denunciante y la familia que levantó el edificio vino motivado por un exceso de construcción, al sobrepasar en un 1,65 metros la altura máxima de cornisa. Los denunciados siempre defendieron que la obra era perfectamente legalizable cuando entrara en vigor el Plan Xeral de Ordenación Municipal de Malpica. Sin embargo, los jueces no tienen la misma opinión y entienden que la obra tal y como está ejecutada es ilegal y no legalizable y, por tanto, hay que derribarla.

Sobre si el Concello trasladará la minuta a la familia propietaria del piso que va a ser derribado, Parga Veiga solo apunto: «Primeiro será a súa demolición e logo xa veremos se lle pasamos a factura á familia. Iso é algo que haberá que estudalo. Agora non toca falar diso», señaló el alcalde. Los trabajos están valorados en casi 40.000 euros.