Las mayores granjas de la zona superarán su cuota láctea entre un 20 % y un 40 %

Cristina Viu Gomila
Cristina Viu CARBALLO / LA VOZ

MALPICA DE BERGANTIÑOS

Algunos profesionales han alquilado derechos de producción para evitar los efectos de la supertasa

06 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Las principales granjas de la Costa da Morte habrán superado a 31 de marzo, cuando acaba la campaña láctea, la cuota que tienen asignada. La mayor parte de las explotaciones se pasarán entre un 20 % y un 40 %, por lo que, si finalmente hay supertasa, las multas pueden resultar muy costosas. Una parte de los ganaderos que se encuentran en esta situación de exceso de producción alquilaron derechos a los que no iban a utilizarlos. Los que tomaron esa decisión en los primeros días de abril del pasado año se encuentran en una buena posición, puesto que la renta arrancó a céntimo el litro, por lo que la inversión les salió muy rentable, porque en diciembre ya se pagaban 10 céntimos.

Sin embargo, buena parte de los ganaderos que tienen grandes producciones no hicieron nada, a la espera de que finalmente no hubiera supertasa, algo que a estas alturas del año parece prácticamente imposible, puesto que ya en noviembre en el conjunto de España había un 0,7 % más leche que la que correspondía. De hecho, el director general de Producciones y Mercados, Fernando Miranda, reconoció que nunca se había producido tanta y que el 8,5 % de los ganaderos gallegos había superado la cuota que tenían asignada.

La mayor parte de los productores se pasaron de la cuota a finales del pasado año o en enero y aunque quedan tres meses para el fin de la campaña no tienen la intención de bajar el ritmo, por lo que terminarán con una supertasa de hasta el 40 %. Es lo contrario de lo que hizo José Pose, un ganadero de Malpica, que secó todas sus reses en octubre, cuando se le agotó la cuota.

Buena parte de los que están produciendo de más lo hacen por convicción. Es el caso de Víctor Gómez, de Muxía, quien asegura que la situación «non é lóxica. Endebedámonos cando compramos a cota e agora, na última campaña, temos que prepararmos para este sablazo. Non ten nin pés nin cabeza». Confía en que finalmente no haya sanción. Es la esperanza de muchos, pero los datos indican lo contrario.

La mayoría ha hecho sus cuentas y ha asumido un riesgo calculado. Un profesional de la zona calculaba que tendría que hacer frente a unos 90.000 euros, de los que 70.000 eran el equivalente al alquiler de cuota, por lo que prefería jugarse los 20.000 restantes. Su último contrato, que acabó en marzo del 2014, fue por 42 céntimos el litro.