Encuentran en el fondo del puerto de Laxe el cuerpo del zasense desaparecido hace 10 días
LAXE
Fueron dos hermanos buzos los que localizaron hundido el Daewoo Nubira en el fondo del muelle comercial
20 dic 2020 . Actualizado a las 22:29 h.Dos hermanos buzos de Camariñas, Ismael y Richard Tajes Mouzo, a título particular, localizaron sobre las dos de la tarde de este domingo un Daewoo Nubira color azul en el fondo del mar, junto al muelle comercial del puerto de Laxe, y a unos 12 metros de profundidad. El turismo fue hallado con las ruedas hacia arriba y en su interior fue localizado el cuerpo de un hombre y todo apunta a que se trata de Manuel Rodríguez Eiroa, Manolo do Piñeiro, el vecino de O Allo (Zas) de 54 años de edad, que desapareció hace ahora diez días tras salir de su casa en dirección, supuestamente, a su puesto de trabajo como transportista en la empresa Ramos, y del que nunca más se supo.
Una vez localizado el vehículo, los buzos señalizaron su ubicación con una baliza, a unos 15 metros del muelle, cuyo cabo fue atado a la parte posterior del turismo para que la Guardia Civil y la autoridad judicial procedan a la retirada y el levantamiento del cuerpo para su traslado al Chuac, donde la autopsia determinará las causas de su muerte. De forma paralela se procedará también a la retirada del vehículo siniestrado.
Con la aparición del cuerpo de Manuel Rodríguez Eiroa se pone fin a una serie de amplios operativos de búsqueda, que se iniciaron 24 horas después de ser denunciada la desaparición y en los que llegaron a participar más de 150 personas, como el que arrancó a las nueve de la mañana de este mismo domingo en Laxe.
Laxe se convirtió en los últimos días en el epicentro de la búsqueda de este vecino de Zas, nacido en el lugar de O Piñeiro, Cabana, de ahí su apodo de Manolo do Piñeiro. La última señal emitida por el teléfono móvil particular de Manuel Rodríguez Eiroa, pasadas las seis de la mañana del pasado jueves, día 10, quedó registrada precisamente en el puerto laxense. Este sábado se llevó a cabo una revisión del fondo portuario por parte de un buzo privado y agentes del GEAS de la Guardia Civil, aunque después de siete horas de trabajo no se pudo acreditar la existencia de ningún vehículo ni tampoco de restos humanos en el fondo portuario de Laxe. La zona de búsqueda fue otra muy diferente a donde apareció finalmente el coche, pero los allegados de Manuel Rodríguez y algunos guardias civiles tenían claro que allí estaba Manolo do Piñeiro. Por desgracia acertaron en sus intuiciones.