El Classic Laxe coge forma y color

LAXE

«Iamos a distintas concentracións e pensamos: ?¿Por que non facer unha en Laxe co entorno tan bonito que ten??», explica Adrián, uno de los organizadores

21 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Fue hace cuatro años cuando un grupo de 3 amigos con sus novias decidieron hacer el Classic Laxe, una quedada de vehículos antiguos en la que la única condición es que tengan, como mínimo, más de 30 años. «Iamos a distintas concentracións e pensamos: ‘¿Por que non facer unha en Laxe co entorno tan bonito que ten?’», explica Adrián, uno de los organizadores. Y así fue como comenzó esta cita anual que, en colaboración con el Concello, se va consolidando cada año en el calendario veraniego hasta llegar, el pasado domingo, a los 91 vehículos participantes.

Con inscripción previa y mismo en el propio día minutos antes de la salida, familias enteras desayunaron juntas en el núcleo urbano a las 9 de la mañana para tomar la salida una hora y cuarto más tarde. Motos, coches y furgonetas, pues hubo un poco de todo, se dirigieron a los Batáns de Mosquetín, en Vimianzo, para «facer un pouco de turismo», comentó Adrián. Y a las 12.30 fue el momento de tomar el aperitivo en Casa da Vela, en Canduas, para ir abriendo el apetito de cara a la gran comida que se celebraría luego en la Praza dos Voluntarios.

Fue este el punto final de la ruta y el que consiguió allegar hasta los vehículos a una mayor cantidad de observadores durante la tarde. A las 18.00 se efectuó la entrega de premios al coche y a la moto más antiguos, de los años 50; al participante más lejano, de Mos, en Pontevedra, y al participante más veterano, un vecino de la Costa da Morte. Con todo, lo más destacado fue una furgoneta que, en sus mejores años, funcionó como coche de bomberos. Su piloto, un inglés afincado en la Costa da Morte desde hace tiempo. «Para o ano máis», avanza Adrián.