«Temo por mi vida y las de mis hijas»

T. Longueira / E. Mouzo CARBALLO, A CORUÑA / LA VOZ

LAXE

Ana Garcia

«Llevo tiempo sufriendo esta situación, pero no tengo a dónde ir. Estoy desesperada», relató una laxense que denunció malos tratos físicos y psíquicos por parte de su expareja

27 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Tiene miedo. Mucho miedo. Por eso pide anonimato. Por eso y porque tiene dos niñas de corta edad. Reside en Laxe y tiene 37 años. Inició en el 2013 una relación sentimental con la que fue su pareja hasta hace poco. «Al principio no le notaba nada raro en su comportamiento, pero con el paso del tiempo empecé a notar cosas raras en su forma de ser. No sabía a que achacarlo hasta que descubrí que consume drogas de forma habitual, además de sufrir esquizofrenia y en ese estado se vuelve muy violento», relató.

La situación empezó, según ella, a complicarse «a finales del 2017. Me llegó a decir que me iba a matar y le creo, estoy convencida de que si la Justicia no toma medidas urgentes, lo hará, seguro». La denunciante ha residido siempre en la casa de los padres de su ya expareja: «No tengo a dónde ir, vivo de una prestación que se me agotó precisamente este mes y nadie me quiere alquilar porque en Laxe nos conocemos todos y la gente sabe lo que pasa en casa». La presunta víctima denunció en su momento a la que fue su pareja durante unos cuatro años: «Pero me eché para atrás al final, no sé por qué, pero lo hice». Esta semana dijo basta. «Llegué con mis hijas de la guardería y él se estaba haciendo un bocadillo». Según su versión, el hombre «se encontraba bajo los efectos de las drogas, como es habitual y se volvió violento». Intentó marchar de casa con sus hijas, pero el denunciado se negó: «Me cerró la puerta y empezó a golpearla hasta romperla. Aproveché un hueco roto para escapar con las niñas y me fui para la casa de una tía de él». La ya expareja fue arrestada por la Guardia Civil, pero la denunciante sabe que tarde o temprano regresará a la casa donde reside con sus padres y, claro, no quiere encontrarse con alguien que tiene atemorizada «a toda la familia». Y añadió: «No solo me ha agredido a mí, sino también a sus padres». De hecho, no quiere estar más en esa vivienda, no solo por ella, sino por sus pequeñas: «Es que temo por mi vida y por las de mis hijas». Hoy declarará en el juzgado de Carballo.

El Concello de Laxe le ofrece una casa de acogida en Santiago, pero se niega a marcharse

La denunciante se puso en contacto este miércoles con el Concello de Laxe para buscar un hogar provisional a la espera de que se resuelva el litigio. A la reunión acudió el alcalde, José Manuel Mouzo Castiñeira, y una asistente social. Pero no hubo acuerdo.

«O Concello ofrécelle como solución unha casa de acollida para ela e as nenas en Santiago, pero a muller quería que se lle axudase pagando un aluguer dun piso en Laxe e iso é imposible porque o Concello non pode pagar un aluguer e unha fianza, e moito menos de forma indefinida», argumentó el regidor, una versión que molestó a la presunta víctima de malos tratos: «Sencillamente no quieren ayudarme, me ofrecen una casa de acogida pero yo tengo a mis hijas matriculadas en una guardería de Laxe. Por culpa de un maltratador no tengo porque cambiar la rutina y la vidas de mis dos pequeñas. Y además no tengo dinero para hacer frente a un alquiler».