Una vez más, es el primer concello de la Costa da Morte en sacar adelante las cuentas para el año que viene, que ascienden a cerca de cinco millones de euros
02 dic 2022 . Actualizado a las 17:36 h.La corporación de Fisterra aprobó en un pleno celebrado este jueves su presupuesto para 2023, que asciende a 4.827.178,47 euros y que supera en más de medio millón a las cuentas de 2022. Tras salir adelante con los votos favorables de PSOE y BNG y la abstención del PP, el municipio fisterrán vuelve a ser el primero de la Costa da Morte en aprobar su previsión económica de cara al próximo año.
Personal (1.395.341,32 euros) y gasto corriente (1.523.049,99 euros) se llevan buena parte de los fondos, aunque el ejecutivo prevé incorporar más dinero a esta última partida a través del plan único de la Diputación de A Coruña. «A parte do POS que se nos permita destinar a gasto corrente usarémola case toda, sobre todo para facer fronte ás facturas eléctricas», indicó el alcalde, José Marcote, durante la sesión plenaria.
A inversiones reales se destinarán 1.733.919,83 euros, medio millón más que en 2022, que serán financiados con fondos propios o con aportaciones de otras Administraciones. De la Diputación de A Coruña prevén recibir, por ejemplo, 200.000 euros para el Mercado Cultural y otros 274.040 para la rehabilitación del polideportivo, además de otras partidas de menor importe para acometer mejoras viarias o en la red de saneamiento.
Apenas hubo debate en este punto del orden del día, aunque el portavoz del grupo popular, José Manuel Traba, sugirió que en el próximo mandato se cree una comisión de Hacienda para poder debatir los presupuestos antes de llevarlos a pleno o hacer sugerencias.
Renuncia de Santiago Insua
En el pleno del jueves también se dio cuenta de la renuncia del concejal del PP Santiago Insua, que decidió dejar la corporación tras veinte años. «A ilusión e a saúde non son as mesmas, e hai que tomar decisións», apuntó Insua, que se deshizo en agradecimientos. También el regidor lo felicitó por sus dos decenios de trabajo y avanzó que pronto se convocará un pleno para que el próximo en la lista (en principio le tocaría a Luis Insua) tome posesión como concejal en el PP.
Tensión en las mociones
El momento más tenso de la sesión se dio durante las mociones, en concreto en una en la que la Plataforma Pediatras e Matronas Xa pedía el apoyo de la corporación a la Iniciativa Legislativa Popular por la sanidad pública. La propuesta había quedado sobre la mesa en el pleno anterior, ya que el alcalde no aceptó la urgencia de la propuesta, pero el jueves sí se debatió y una portavoz de la plataforma intervino.
Agradeció el apoyo de los munícipes, aunque lamentó que la propuesta no se considerase prioritaria en la sesión anterior, una crítica a la que se sumó el teniente de alcalde, el nacionalista Xan Carlos Sar. Este rogó al alcalde que respetase el reglamento de funcionamiento de los plenos y aseguró que la urgencia de las mociones debía ser votada por la corporación, no corresponder a la decisión únicamente del alcalde. Habló de «inxustiza», una palabra que no sentó nada bien al mandatario, que enseguida se enzarzó en un tenso debate con Sar. Finalmente, Marcote aseguró que revisaría si había errado, pero que en todo caso no se trataba de ninguna «inxustiza» al no ser intencional.
Xeal, Autovía, peajes y tren de proximidad
Esta moción salió adelante por unanimidad antes de debatirse otra en apoyo a las reivindicaciones del comité de Xeal, que en este caso recibió el respaldo de PSOE y BNG y la abstención del PP. Los nacionalistas, por su parte, presentaron otra exigiendo la conclusión de la autovía, la eliminación de los peajes, la mejora de las comunicaciones o un estudio de viabilidad para implantar un tren de proximidad en la zona. Era una iniciativa del BNG a nivel comarcal que ya fue a pleno, por ejemplo, en Corcubión, y que para nada gustó al grupo popular.
Estos la tildaron de «mitin» e increparon a Xan Carlos Sar por, según ellos, tener «ao pobo en condicións lamentables». Tampoco el alcalde, que habló por los socialistas, se mostró muy de acuerdo con la moción, al considerarla muy genérica y con demasiadas propuestas diferentes «que merecerían cadanseu debate». Sar defendió el trabajo realizado por su partido a nivel comarcal en la elaboración de la moción y aseguró que son cuestiones para «unha vida digna na Costa da Morte». Salió adelante con los votos en contra del PP y el beneplácito de PSOE y BNG.