La Guardia Civil chafa un botellón a cubierto en Fisterra

Cristina Viu Gomila
Cristina Viu CARBALLO / LA VOZ

FISTERRA

ANA GARCIA

Los agentes impusieron el sábado unas catorce de multas

08 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

No estaba la noche para botellones al raso y no era tampoco la primera vez que salía de esa humilde vivienda de Denle más ruido del que corresponde a una pequeña aldea fisterrana, sobre todo si como el resto de España está sometida a un toque de queda que manda a todo el mundo para casa a las once de la noche.

Quién llamó a la Guardia Civil es algo que a lo mejor no se sabrá nunca. La patrulla de Muxía supo de la fiesta pasada la medianoche y se plantó en el lugar a la 1.40 minutos. Enseguida encontraron la casa. Una nube de personas que estaban en el exterior se dispersaron a ver llegar a los agentes, que sí encontraron gente dentro. Al menos 10 personas fueron identificadas y sancionadas. Además de música había ginebra, refrescos, vasos desechables, sofás y una cocina que era el centro de la casa, demasiado pequeña para acoger a toda aquella gente que resultaba evidente que no eran convivientes. Si hubieran sido seis la cosa no hubiera pasado a mayores.

Por si fueran pocos los localizados en primer lugar, los agentes muxiáns se encontraron con la llegada de un vehículo cuyo conductor también se apercibió de la presencia de los guardias y lejos de atender a las ordenes de alto que le daban emprendió la huida marcha atrás por las estrechas callejas del lugar. A los agentes les dio tiempo de quedarse con la matrícula y al invitado a la celebración la noche de juerga también le saldrá cara porque ha sido obsequiado no con una sino con dos sanciones, una de ellas por un delito contra la seguridad del tráfico.

Fisterra no tiene restricciones especiales, sino las que rigen en toda Galicia para los municipios que no están sometidos a más limitaciones. Rige como en el resto de España el toque de queda que los participantes a la fiesta se saltaron ampliamente. También la imposibilidad de reunirse con más de seis personas.

El sábado los guardias tuvieron buena pesca en Fisterra. Además de la fallida fiesta de Denle sancionaron a un hostelero fisterrán y desalojaron el local que se pasaba mucho del aforo máximo. Y eso que en Fisterra la ocupación del interior es del 50 %, y en la terraza, del 75 %. A pesar de eso, buena parte de la hostelería local adelantó el cierre este año por supuesta falta de clientela. No fue el caso del sábado.