El paro se ceba con Cee y Fisterra, con 63 desempleados más que en agosto

En la Costa da Morte el paro ha bajado en 23 personas con respecto al mes anterior. Se trata de una tendencia extraña porque lo habitual es que suba al terminar la campaña estival, pero más curiosa todavía es la diferencia enorme que hay entre las distintas comarcas. La fisterrana se ha llevado la peor parte. Solo Cee y Fisterra acumulan 63 desempleados más de los que habían en agosto. Se trataría de una subida casi normal, muy similar a la que se produjo en la misma zona hace exactamente un año, en septiembre del 2019, pero en un verano como el que acaba de terminar se trata de un dato llamativo, porque las contrataciones han sido muchas menos. Además, contrasta con lo ocurrido en otras comarcas. En Bergantiños y Soneira la tendencia ha sido justo la contraria.

De todos modos, hay muy poco espacio para la esperanza y las buenas noticias en un ejercicio marcado por la crisis que ha puesto en marcha la gestión de la pandemia. Este año hay en la Costa da Morte 851 desempleados más que hace solo un año. Se trata de una subida de un 12 %, un dato muy preocupante.

Bergantiños

En septiembre del 2019, los desempleados en la zona eran 6.383, un total de 171 más que en agosto, en tanto que este año, los parados son menos que el mes anterior, sobre todo en Bergantiños, donde ha bajado en 47 personas. Buena parte de este dato positivo corresponde a A Laracha, que ha registrado la mayor bajada de la zona.

La construcción es el sector que mejor sortea la crisis

En la construcción hay también ahora más desempleados que hace solo un año, pero el aumento porcentual es mucho menor que en otros sectores y la variación intermensual es apenas perceptible. Fue el colectivo más castigado en la crisis del 2008, pero ahora está aguantando bastante bien el tirón. Donde sí se nota el daño causado por la gestión del coronavirus es en los servicios. En solo un año han aumentado los demandantes de empleo en 571 personas. Se trata del sector más amplio, con 4.239 personas en la Costa da Morte y en el que también se ha cebado el aumento intermensual, puesto que ahora hay más de 100 parados más que en agosto, lo que indica la pérdida de empleos por el cierre de la campaña estival.

«A Costa da Morte é unha boa zona para quedar a traballar»

s. g. / a. garcía

Alberto Recarey Pérez ten 25 anos e é enxeñeiro industrial (e futbolista). De Ponteceso, traballa en Vimianzo, na empresa de enxeñería de Martín Lema. Precisamente esta semana cumpría o primeiro aniversario do seu primeiro contrato, recén rematada a carreira en Vigo, e máis o máster. A oportunidade chegoulle e aproveitouna, e non lonxe da casa. «Xurdiu aquí, e quedei, e moi contento», explica. Non é tan habitual en carreiras como a súa, nas que habitualmente hai que buscar traballo fóra, a coñecida e penosa fuga de talento.

-Tiña pensado marchar, chegado o caso?

-Se non houbese aquí, pois teríame que adaptar. Se hai que ir para fóra, como tantos, pois que remedio. Pero prefiro isto, fomentando ademais o rural, seguindo na terra na que temos os amigos e a familia, na que medramos. Onde temos as nosas relacións, o ocio. A gústame estar cerca da miña xente.

-Como lles afectou o covid?

-Teletraballamos durante o tempo que foi necesario, pero xa levamos tempo con toda normalidade. Desenvolvemos proxectos de todo tipo, somos unha oficina técnica.

-Ten compañeiros de promoción en paro, que tivesen que irse?

-Pois a verdade é que todos foron atopando algo, por diversos sitios de Galicia (algún, noutros puntos de España), pero ocupados.

-Cre que esta comarca ten atractivos para quedar?

-Si, dende logo, a Costa da Morte é unha boa zona para quedar a traballar. Se cadra non podes facer cousas como nunha gran cidade, tipo Madrid ou Barcelona, pero é un lugar perfectamente válido para sacar adiante iniciativas importantes. E con polígonos aos que se lle pode sacar aínda máis partido.

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