Estas críticas le parece «surrealistas», sobre todo atendiendo a la «forma fraudulenta» en la que, según dice, consiguieron su parada algunos en Fisterra
05 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Manolo Canosa, uno de los socios de Brigantia Viaxes, la empresa que está detrás del proyecto Vive Fisterra, y que estos días se encuentra en el centro de varias polémicas con distintos operadores de transporte de Fisterra y Muxía, estuvo ayer en el micrófonos de Radio Voz Bergantiños, para dar algunas explicaciones sobre su trabajo y defender la total legalidad.
Básicamente las disputas vienen porque el autobús turístico que comunica la zona con Santiago, lo que ha motivado las quejas de Ferrín, de los taxistas y al menos tres denuncias por infracciones muy graves de la Policía Local de Muxía; y por el tren turístico, que no le hace especial gracia a los taxistas fisterráns, por la manera en la que fue concedido y se está gestionando.
A Canosa estas críticas le parece «surrealistas», sobre todo atendiendo a la «forma fraudulenta» en la que, según dice, consiguieron su parada algunos en Fisterra, por ejemplo trasladándola desde Sardiñeiro. Denuncia, además, que solo dos de los profesionales quieren trabajar con su empresa cuando se trata de «un servizo público». Tampoco entiende este rechazo a un tren que funciona en otros lugares turísticos como Cambados, O Grove o Santiago y en los que se ofrece además de la posibilidad de ir al faro, «información da historia de Fisterra». Por todo ello, incide en que a lo único que aspira es que a sus servicios «sean rendibles» ya que a los que «intentan que non traballe» no puede darle solución alguna.