Nace una asociación en Soneira y Fisterra para complementar a Afaber en Bergantiños
22 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Así como en la parte norte de la comarca Afaber hace un trabajo encomiable, en la zona sur de la Costa da Morte hasta ahora las familias afectadas por el alzhéimer y otras demencias tenían muy poco o nada a quien recurrir para apoyarse ante el drama que supone, tanto para ella como para su entorno, una persona que necesita cuidados las 24 horas. Además, el Virxe da Xunqueira tampoco tiene unidad de neurología, lo que, en pacientes de edades avanzadas, implica que las derivaciones que los médicos de cabecera hacen al hospital de A Coruña sean inferiores que en otras localidades más próximas al centro de referencia.
De ahí que el psicólogo muxián César Bugallo y la educadora camariñana Laura Mouzo, junto a otros familiares de enfermos, hayan decidido poner en marcha la primera asociación de este tipo para Soneira y Fisterra, con el objetivo de cumplir desde Cee una tarea similar a la de Afaber en Carballo. Es la Asociación de familiares de enfermos de alzhéimer e outras demencias de Fisterra e Soneira (Afafes).
Acaban de empezar, todavía completaron los trámites el mes pasado, con lo que, a corto plazo, aspiran a tener un local desde el que informar, asesorar, formar y acompañar a las familias; mientras que se marcan como meta, la creación de una unidad de atención desde la que trabajar. «Non se trata dun centro de día, senón de algo bastante máis modesto que lle poida dar un respiro aos coidadores, porque unha demencia é algo que afecta a toda a familia. O coidador éo as 24 horas do día e moitas veces renuncia á súa propia vida, cos custes persoais e indirectos que iso supón: deixa de traballar, de cotizar, de producir.... veñen depresións, ansiedades e acaba tendo que medicarse tamén el», explica el especialista en gerontología, que se ha ofrecido como voluntario para empezar a trabajar.
Al margen de la ayuda a las familias que ya sufren este problema, la asociación también pretende moverse por los municipios del entorno para realizar un cribado, mediante pruebas neuropsicológicas a pacientes, para ver si existen indicios de un deterioro cognitivo. En términos más llanos, para diferenciar lo que es propio de la edad y lo patológico, que puede necesitar atención especializada. Todo, porque, como también hace Afaber en sus campañas y actividades, insisten en que el mejor campo para actuar es el de la prevención, para retrasar al máximo los efectos de estas dolencias, así como en los primeros escalones de la enfermedad, con el objetivo de que los pacientes evolucionen de la mejor manera posible.