Parte de una línea de alta tensión irá bajo tierra en Dumbría para que no afecte al Camiño

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

DUMBRÍA

ANA GARCIA

El proyecto incide tanto en el patrimonio cultural del entorno que es necesario un análisis ambiental más completo

11 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Dumbría tendrá a medio plazo una nueva línea de alta tensión atravesando parte de su municipio. Nada nuevo en la zona con más tendidos de la comarca, pero con algo llamativo e insólito (por su longitud) en la Costa da Morte: algo más de mil metros irán bajo tierra para que no afecte al Camiño de Santiago.

Se trata de la línea que enlazará el futuro parque eólico de Paxareiras II (el mismo nombre que aquellos primeros de principios de siglo, enlazados con Carnota y que siguen activos), a escasa distancia, más o menos, de San Pedro Mártir, ya en Cee, con Regoelle, donde está la gran subestación de Red Eléctrica Española y la de Naturgy, que absorberá una buena parte de la producción eólica de la zona.

La idea de conducir bajo tierra parte de la línea (el total es de 7.128 metros) es de la empresa, pero la Xunta, a través de la Dirección Xeral de Calidade Ambiental e Cambio Climático, cree que hay que ir más allá, con una evaluación ambiental ordinaria, que exige más cautelas y controles. Sobre todo en el patrimonio cultural, que no es poco. El documento cita que en el entorno del proyecto se han identificado ocho elementos arqueológicos: dos castros, dos petroglifos y cuatro mámoas, entre ellas la del Chan das Lagoas. Pero también dos pontellas y numerosos hórreos con consideración de bien de interés cultural, «ademais de muros de pedra feitos coa técnica de construción tradicional de pedra en seco», además del trazado del Camiño en una buena parte de la zona diseñada para los apoyos del cableado. No solo eso: tal y como ha sido diseñado, provocará «certo impacto paisaxístico polas alteracións visuais e de calidade paisaxística», indica el informe de la Xunta.

Pero el Camiño es lo principal a la hora de marcar los cambios, obligando a realizar modificaciones. De manera resumida: «A traza seleccionada é incompatible coa preservación dos bens do patrimonio cultural». No solo eso: «Son previsibles efectos significativos sobre o medio ambiente», de ahí la necesidad de volver a evaluar.

El Concello de Dumbría también presentó numerosas alegaciones. Entre ellas, que el impacto visual y paisajístico incumple la políticas de la Axencia de Turismo de Galicia, además de triplicar la distancia sobre una alternativa más corta, rodeando las instalaciones de la fábrica de ferroaleaciones. Hay incluso una tercera opción de trazado que el gobierno local descarta «por completo», al ocupar numerosas fincas agrícolas y pasar demasiado cerca de la casas de Hospital y Paradela. Las otras dos, y sobre todo la elegida, guarda un poco más las distancias con ambos núcleos.

«Unha densidade de cableado moi elevada» 

Lo dice el Concello en sus alegaciones: el municipio tiene ya «unha densidade de cableado moi elevada». Numerosas líneas de alta tensión cruzan el territorio, y más que lo harán hacia las nuevas subestaciones de Regoelle en los próximos tiempos. Entre embalses, parques eólicos y ferroaleaciones, ese es el paisaje industrial que reporta apenas dividendos. La de Paxareiras es de 66 kilovoltios, pero otra proyectada por Ferroatlántica para los próximos meses es de 220, lo que aumenta considerablemente el tamaño de los tendidos y las separaciones de seguridad.