Dumbría lució en su máximo esplendor con La Vuelta

Melissa Rodríguez
melissa rodríguez CARBALLO / LA VOZ

DUMBRÍA

Roglic se suma a Purito y Alexandre Geniez en la historia de O Ézaro

05 nov 2020 . Actualizado a las 19:34 h.

O Ézaro se puede ver estos días en numerosas televisiones gracias a La Vuelta. Roglic ha pasado a la historia de este punto clave de Dumbría en la que ya estaban Purito y Alexandre Geniez como vencedores de los dos anteriores finales de etapa. Ahora están por ver las consecuencias turísticas en el futuro próximo. La Costa da Morte lució este martes en su máximo esplendor gracias al buen tiempo. Las olas solo estaban a unos metros de los ciclistas. El monte Pindo impactaba desde los helicópteros que sobrevolaban la zona.

El Concello se mostró ayer muy contento con el desarrollo de la prueba a todos los niveles. «Deportivamente foi moi boa. Houbo diferenzas entre os favoritos e estas decidíronse na subida», destacaron. «Foi unha das etapas nas que apenas se viu público, que era o que se buscaba polo covid», añadieron. Curiosamente, la repercusión económica que dejó en la comarca fue «a mellor en todos estes anos debido a que ao ser xornada de descanso o día anterior, moita xente da organización aloxouse aquí», expusieron. La propia pandemia provocó que el dispositivo para la marcha también fuera el más destacado hasta el momento, sin una sola incidencia. Por último, el formato de contrarreloj individual, nunca hasta ahora desarrollado en O Ézaro, dejó más horas de retransmisión en directo, más tiempo para contemplar a los corredores y un cambio de bici espectacular a pie de la cascada. Así pues, el único inconveniente fue las horas que estuvo la carretera principal cortada al tráfico, pero hasta en esto, el Concello solo tiene palabras de agradecimiento a los vecinos por su comprensión.

En Dumbría tienen claro que el paso de La Vuelta por O Ézaro es «a mellor promoción turística que se lle pode facer ao pobo» y van a seguir trabajando para que sean muchas más las hazañas a contar sobre el gran muro. El ciclismo es como un circo que va dejando un espectáculo allí por donde pasa. En el caso de la Costa da Morte, los paisajes, las pendientes, las carreteras y el hacer del Concello y las fuerzas de seguridad lo hacen mayor todavía.