A la espera de que arranquen las tres nuevas centrales

La Voz

DUMBRÍA

31 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El próximo gran avance de Ferroatlántica en la Costa da Morte debería ser la puesta en marcha de las tres nuevas minicentrales, cada una de ellas de 6,5 MW de potencia instalada, que han ido acumulando retrasos por diferentes motivos, entre ellos la quiebra de Isolux Corsán, la primera constructora a la que se le encargó el trabajo. Ponte Olveira II y Fervenza II, aunque todavía se trabaja en ellas, estarían prácticamente finalizadas y Novo Castrelo también muy avanzada, con lo que fuentes de los trabajadores aseguran que es ya más una cuestión administrativa y de permisos que se puedan poner en marcha, algo para lo que todavía no hay una fecha concreta.

El director ahora jubilado de Ferroatlántica en la zona, Carlos Oliete, calculaba en que Ponte Olveira II se pudiese probar en agosto del año pasado, después de conocida ya la crisis de Isolux, que había obligado a modificar la previsión inicial que era enero de ese mismo año.

Cuando estén en funcionamiento normalizado, estas nuevas infraestructuras, en las que Ferroatlántica ha invertido más de 30 millones de euros, debería incrementar la capacidad de producción hidroeléctrica del río Xallas entre un 12 y 17 %, reduciendo así en miles de toneladas la emisión de gases contaminantes que se produce para generar esa misma electricidad quemando combustibles fósiles.

Además, la finalización de las obras de las centrales tiene también otro componente importante, porque en los municipios de Dumbría y Mazaricos están esperando el arreglo de varias vías de comunicación secundarias que se han visto afectadas por estos trabajos.