El sindicato asume la firma «convencidos de que é a decisión máis adecuada para tódalas plantas e os traballadores»
12 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Tras el abandono de los delegados de CC.OO. y UGT de Cee y Dumbría por la firma del preacuerdo con el Grupo Ferroatlántica el pasado sábado en Madrid, el sindicato que hasta el año pasado dirigía Cándido Méndez y que ahora es responsabilidad de Pepe Álvarez, ha hecho pública una nota en la que justifica una decisión que facilitará el desarrollo que plan de inversiones y empleo de Ferroatlántica y que será una realidad el 31 de mayo, cuando lo aprobará la Xunta.
UGT-FICA sostiene que asume la firma «con responsabilidade» y seguros de que se trata de la mejor decisión tanto para las plantas como para los trabajadores del grupo en España, «ao desenvolver unhas garantías de emprego e de inversións que, na actual situación de crise do sector, temos poucas ocasións de negociar». Hacen hincapié, además, en la mala situación económica del grupo que, según el sindicato, «atravesa unha grave situación de débeda».
UGT sostiene que el objetivo que pretende conseguir es que el Grupo Ferroatlántica «se dote dun plan de futuro, de investimentos e garantía de emprego que, de non ser así e de non acadar os fondos necesarios, a empresa sostén que se chegaría ao peche de centros, expedientes, despedimentos, e deslocalización de actividades».
Potestad organizativa
La comisión ejecutiva de UGT-FICA Galicia, que es la que firma en comunicado tras el abandono de sus delegados, el preacuerdo dice «claramente que a parte social non ten potestade ningunha para definir de onde se van obter os fondos por parte da empresa», lo que forma parte de su «potestade organizativa, aínda que sempre dentro da legalidade e baixo a vixilancia dos sindicatos que non aceptaremos ningunha decisión que poida levar á perda de capacidade produtiva e poña en risco os postos de traballo».
También se refiere UGT-FICA a las cuestiones internas, ya que abandonaron la formación todos sus delegados en Ferroatlántica, entre los que se encuentra el presidente del comité de empresa. El sindicato señala que la forma del preacuerdo está «ratificada polo 73% da representación sindical do Grupo Ferroatlántica». Probablemente se refiere a trabajadores de otras factorías españolas. Además de los abandonos de los miembros de UGT y CC. OO., la CIG se negó a participar en la reunión celebrada en Madrid.
La segregación está pendiente de que Ferroglobe, la multinacional de la que forma parte Ferroatlántica y que está participada mayoritariamente por el Grupo Villar Mir, consiga las autorizaciones administrativas. Además, el preacuerdo tiene también fecha de caducidad. Si no entra en vigor antes del 31 de diciembre de este año quedaría sin efecto. Entre los compromisos está seguir destinando el 1 % del coste de la masa salarial a formación y 800.000 euros en responsabilidad social corporativa, de la que viven muchas entidades.