El mercado de la droga en la zona lleva nombre de septuagenaria

J. V. Lado, T. Longueira CEE, CARBALLO / LA VOZ

CORISTANCO

Los clanes de la Tula y de la Vella Lisa dominan el tráfico en Bergantiños

11 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Elisa González Botana. Tiene 78 años y es considerada por la Guardia Civil como la matriarca del grupo asentado en O Carrizal. Fue condenada en 1997, 1998 y en el 2006, aunque en este último caso, el Supremo mandó repetir el juicio.

Guadalupe Iglesias Jiménez. Varias veces detenida y encarcelada, La Tula, que ahora tiene 78 años, montó un verdadero fortín de la droga en la Colina de San Lois (Ardaña) que implicó y del que se lucró a la mayor parte de su familia.

Dos mujeres camino de los 80 años dirigen o lo hacían hasta hace nada los principales supermercados de la droga en la comarca de Bergantiños, tanto de venta directa a través de sus amplias redes familiares, como de suministro a distintos camellos que operan en la zona. Unas estructuras que han saltado varias veces por los aires y otras tantas se han vuelto a reconstruir en torno a las respectivas matriarcas, sus descendientes y familias políticas.

El conocido policialmente por el clan de Neaño estaría encabezado, según los investigadores, por Elisa González Botana, de 78 años, alias Vella Lisa. Se trata de la mujer que supuestamente recibió a la Guardia Civil revolver en mano cuando iba a ser detenida el pasado viernes en su casa de O Carrizal, Coristanco.

En el instituto armado relacionan a este grupo, bastante desmantelado en los últimos años, con el tráfico de estupefacientes durante finales de los 90 y principios de la década pasada. La aparente solidez del grupo se vino abajo tras la operación contra el narcotráfico efectuada en O Carrizal, así como en otros puntos de Galicia en mayo del 2006. González Botana que, por aquel entonces, tenía 69 años, ya había sido condenada anteriormente en los años 1997 y 1998 por traficar con estupefacientes, por lo que nunca dejó de estar en el punto de mira de las fuerzas de seguridad.

El pasado viernes, Elisa González fue de nuevo arrestada, al igual que Bruno García García, persona a la que en el instituto armado relacionan también con este clan de Neaño.

A no menos nivel que la Vella Lisa sitúan los expertos en las redes de trapicheo de drogas de la comarca a Guadalupe Iglesias Jiménez, alias La Tula, alejada de los focos en los últimos años, pero que también sabe lo que es estar en prisión y ver como los agentes caen una y otra vez sobre sus hijos, yernos y nueras. No en vano, durante una de los últimas detenciones aseguraba abiertamente: «Os que están fóra teñen que traballar para os que están dentro», lo que da una idea del deber marcado en la familia para los que se encuentran en la calle respecto a los encarcelados.

En esta ocasión de su entorno fue detenido Mihail Ionita, de nacionalidad rumana y marido de María Emilia Silvia Iglesias, la hija de La Tula, que en esta ocasión acudió a declarar de forma voluntaria, sin necesidad de que los agentes tuvieran que detenerla.