Los promotores de un gran fracaso

luis lamela

CORCUBIÓN

ARCHIVO ALEJANDRO LAMAS

El motel El Hórreo de Corcubión, crónica lo que iba a ser y finalmente no fue

22 nov 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

«La maquinaria del franquismo, inmersa en plena revolución turística, se puso a funcionar y Promoción de Turismo de Galicia (Protugasa), iniciativa de varios coruñeses bien relacionados en los círculos del régimen hizo realidad este auténtico hito para la época. Francisco Jiménez de Llano era su presidente y, tal como recogen algunos actos administrativos de años posteriores, José Trillo —Fernández— actuaba como consejero delegado». (J. V. Lado, periodista, en La Voz, 7 de octubre de 2019).

Así comenzamos esta crónica, la de una historia que creó entre los vecinos de Corcubión una enorme ilusión y terminó en un gran fracaso. La guerra civil y la nueva situación política y económica de España había llevado a cerrar el camino de la industrialización en la villa, y los nuevos dirigentes locales apostaron por el sector turístico para levantar vuelo. Y una de las iniciativas fue la creación de una sociedad, Protugasa, con el fin de construir el Motel El Hórreo, idea con demasiadas sombras con las que algunos dirigentes coruñeses quisieron asaltar los cielos, y terminaron en el más absoluto fracaso.

Tanto el motel de Corcubión como el construido en Pontedeume, el motel La Ría, en los primeros años de la década de 1960, representaron al final un gran fiasco para los pueblos en los que fueron construidos, que esperaban progresar con ellos. En todo caso, ese proyecto fue un gran fracaso empresarial para quienes lo constituyeron, promocionaron, construyeron, gestionaron e invirtieron en él con salvas de pólvora del Rey. Quizás un proyecto acometido sin rigurosos estudios de mercado, lo que, primero, llevó a una enorme ilusión, y a los pocos años, a la ruina.

La idea nació cuando en «Corcubión estuvieron unos señores venezolanos, llegados de Madrid, a los que se quería interesar en el proyecto del motel. Con ellos se inició la búsqueda del lugar. Al llegar al lugar de Santa Isabel, sus palabras fueron: ‘No necesitamos más; aquí debe ser construido el motel'.

No obstante, no se llegó a nada concreto con dichos señores, porque quizá imperase ya en ellos más la idea del negocio que la de hacer un beneficio a Corcubión»…, afirmó el alcalde Ramón Pais. Y habló con José Trillo Fernández-Abelenda, a la sazón concejal del Ayuntamiento de A Coruña: «Al señor Trillo se le dijo que debía interesarse, como hijo de Corcubión que es; y lo tomó con tanto interés, que escogió a las personas más idóneas para llevar a buen fin esta vieja ilusión...».

Y se construyó el motel El Hórreo, categoría 1ª A, y de máximo confort. Y todo esto nació a raíz del famoso Plan de Estabilización, unas medidas aprobadas en 1959 por el Consejo de Ministros que supuso la ruptura con la autarquía falangista. Una de esas medidas quería provocar el turismo internacional hacia España, siguiendo la nueva orientación del Ministerio de Información y Turismo, de Manuel Fraga: el turismo de sol y playa para el Levante español, que es distinto al estacional que acudía, y sigue acudiendo, a este rincón gallego.

Hasta aquí el proyecto en sí, y del que ya conocemos su resultado final, pero, ¿quiénes fueron, además de Jiménez y Trillo, los promotores que aprovecharon las ventajas facilitadas por el régimen para crear una industria turística de primer orden, cuya viabilidad estaba abocada, por el bajo potencial de clientela, al fracaso empresarial?

Pues, los otros inversores más significativos fueron José Fuentes Otero y Máximo Jorge Sanz Valdés, nombres que logré localizar en mis pesquisas, pero seguro que hubo más, como el propio Ramón Pais. En consulta, el Registro Mercantil de A Coruña me aseguraron «que no nos aparece inscrita la sociedad de referencia». Y es muy raro cuando los promotores son reconocidos personajes de la práctica jurídica.

ALVELA

Jiménez de Llano, Fuentes Otero y Sanz Valdés

Francisco Jiménez de Llano nació en Cangas de Narcea y residió en A Coruña desde 1924. Fue abogado y en enero de 1933 participó en Melide en un mitin de Acción Popular y fue elegido en abril de 1934 coordinador del directorio provincial de las Juventudes de Acción Popular.

En mayo de 1933 vicesecretario de la Unión Regional de Derechas y en junio de 1934 secretario provincial de las Juventudes de la CEDA. En enero de 1935 accedió a la secretaría de la Juventud de la URD y a mediados de febrero de 1936 participó en los mítines celebrados por la CEDA en Cee y Fisterra.

Jefe militar en A Coruña

Con el levantamiento militar del 18 de julio, y después de participar en la «pacificación, control y limpieza» en la retaguardia, fue voluntario a los frentes de Asturias y Somosierra con el grado de alférez provisional de Infantería. En enero de 1937, de requetés de Navarra fue destinado a las Milicias de Acción Popular de A Coruña para tomar posesión del cargo de jefe militar.

En marzo de 1937 asistió en Burgos a la Asamblea del Consejo Nacional de milicias armadas de Acción Popular, y cuando era teniente de Intervención militar se casó con María Adela Zato Hourdisán el 11 de febrero de 1942. En la posguerra, en marzo de 1946 aparece como concejal y teniente de alcalde del concello herculino, y en marzo de 1948 como ponente de Hacienda y presidente de la Comisión de Festejos. Y alcalde accidental.

Resumiendo: desde 1932 militó y dirigió las JAP que ayudaron a desestabilizar el sistema republicano, dedicándose después a tres principales profesiones: la abogacía, la militar, en la que llegó a coronel, y la periodística, principalmente deportiva, firmando como Franjilla. También a la política. Falleció a los 70 años el 26 de octubre de 1981.

Un ferrolano

José Fuentes Otero nació en 1916 en Ferrol. Con 17 años obtuvo el título de practicante en Medicina. Fue falangista de la Vieja Guardia y al producirse el golpe militar actuó de miliciano y participó en la «pacificación, control y limpieza» en A Coruña y después en el frente de Asturias. En junio de 1938 ostentaba el cargo de secretario provincial de Sanidad de Falange y el 8 de diciembre de 1939 contrajo matrimonio con Bernardina Morano Pedregal. Desde abril de 1951 fue presidente de la junta directiva del Consejo Provincial de Practicantes y en noviembre de 1954 presidente del Colegio Oficial de Auxiliares Sanitarios de A Coruña.

En noviembre de 1951 se presentó a concejal y fue elegido. Formó parte de varias comisiones, entre ellas la de Obras y fue teniente alcalde y en febrero de 1953 nombrado consejero provincial del Movimiento. Como ponente de Obras fue promotor del monumento a los Caídos en los altos del Montiño. Reelegido en noviembre de 1957, dimitió al cesar en la alcaldía Sergio Peñamaría en julio de 1963. Fue consejero provincial de la Vieja Guardia falangista y falleció a los 81 años el 28 de enero de 1997.

Fundación Alfredo Brañas

Máximo Jorge Sanz Valdés nació en Santiago en 1927. Estudió el bachillerato y trabajó en el Banco Pastor, en Ordes. En junio de 1956 inició la actividad publicitaria y el 27 de septiembre de 1958 contrajo matrimonio con María Dolores Piury González. En abril de 1960 era el director general de Publicidad Maxán y en diciembre de 1966 fue elegido presidente del sindicato vertical Provincial de Prensa, Radio, TV y Publicidad. Él fue uno de los que más se benefició de Protugasa, al llevar las campañas publicitarias de la empresa. Fuera del ámbito empresarial, participó también en política. En diciembre de 1982 como secretario adjunto de campañas electorales de la ejecutiva de Alianza Popular y en agosto de 1983, y a propuesta de Fraga, secretario de la Fundación Alfredo Brañas.

En febrero de 1984 fue el jefe de imagen del exministro vilalbés en la campaña al Congreso de los Diputados. Máximo Jorge falleció el 7 de agosto de 2009 a los 81 años.

Trillo Fernández, jurista y un excepcional relaciones públicas

Para el final dejamos al abogado y procurador de los tribunales, de cuyo colegio fue durante muchos años decano, José Trillo Fernández, nacido en 1922. Estuvo casado con Concepción Alonso Fernández y su vida profesional vinculada a A Coruña. En las elecciones municipales de noviembre de 1951 consiguió acta y al constituirse la corporación con Alfonso Molina como alcalde formó parte de las comisiones de Policía, Obras, Fiestas y Personal. En febrero de 1953 pasó a llevar la ponencia de Policía y en septiembre de 1953 teniente de alcalde. En noviembre de 1957 volvió a presentarse por el grupo de cabezas de familia y salió elegido. Fue nombrado quinto teniente de alcalde y asumió Policía y embellecimiento de la ciudad. Durante años fue el presidente de la Comisión de Fiestas y en febrero de 1961 ejerció de tercer teniente alcalde con Sergio Peñamaría de Llano, que le encargó Policía y Servicios municipales. Al cesar Peñamaría, en julio de 1963 presentó su renuncia.

En febrero de 1959 era vocal de la Junta Provincial de Información, Turismo y Educación Popular y un excepcional relaciones públicas, extrovertido y de verbo fácil.

Él fue el que mantuvo más actividad en la dirección del fracasado proyecto de Protugasa, y en su posterior desarrollo empresarial, por su condición de consejero delegado, ligándose durante muchos años al Skal Club de Galicia, del que, primero, fue vicepresidente y después presidente en abril de 1967 hasta marzo de 1988, que cesó después de 23 años.

Y en este camino, Trillo mantuvo muy estrecha relación y entrañable amistad con Fraga, que fue quien propuso en julio de 1967 la concesión de la Medalla de bronce al Mérito Turístico y el 18 de julio de 1972 la de plata para el corcubionés. En fin, que además de práctica jurídica desarrolló actividades empresariales de tipo turístico, en el campo de los seguros y en el inmobiliario. Y falleció a los 89 años el 19 de noviembre de 2012.