Un cambio en las normas urbanísticas del área rural de Corcubión sale adelante con el PSOE y el BNG

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

CORCUBIÓN

JANET GONZALEZ VALDES

El cambio de la calificación en el castillo del Cardeal queda pendiente de que haya consenso

23 nov 2019 . Actualizado a las 11:03 h.

El pleno de Corcubión aprobó, en su reunión del jueves, la modificación de las normas subsidiarias de Corcubión, en lo relativo a alineaciones y otras distancias con respecto a los viales, en todos los núcleos rurales (son los de la parroquia de Redonda) y en el suelo urbano de O Vilar. Esta propuesta de cambio (aún le queda un largo de camino de exposición pública, alegaciones, y sobre todo la aprobación definitiva o no de la Xunta) salió adelante con los votos del PSOE y el BNG.

El alcalde, Lalo Insua, cree que este cambio es necesario, para solucionar problemas que se arrastran desde hace muchos años, en algunos casos más de 20. Apunta a que viviendas que lindan con la carretera provincial no pueden rehabilitarse o hacer reformas, lo que genera quejas vecinales. «Hai moitos sinsentidos que é necesario arranxar», apunta, además de que la planimetría está obsoleta.

Alfredo González, de Sempre Corcubión, está en contra del cambio. No lo ve necesario, asegura que los vecinos no saben nada, cree que es una transformación global para aspectos que podrían modificarse puntualmente, sobre todo a través de un PXOM muy necesario. De este modo, «desvirtúase o planeamento, e incluso dá lugar a suspicacias, a certo escurantismo, parece que ata hai unha modificación disfrazada para algún caso concreto». También cree que, frente a quienes dejaban los cuatro metros de rigor de separación, ahora solo serán dos, con lo que también se produce un agravio comparativo.

En la sesión había pocos puntos, pero no fue corta, sino que duró más de dos horas y media, también porque cinco grupos para nueve ediles dan para mucho, sobre todo en los ruegos y preguntas. Y cuesta ponerse de acuerdo en determinados asuntos. Por ejemplo, en el cambio urbanístico del ámbito del castillo del Cardeal, algo que quedó sobre la mesa. Hubo discrepancias importantes, sobre todo a cuenta del reparto de cargas urbanísticas (cesiones, uso de espacios...). El alcalde prefiere que las que se le quiten a la fortaleza por ejemplo, sus zonas verdes, para poder realizar alguna actividad hostelera, y estimular así la venta o su uso) se le apliquen a una finca anexa de la propiedad. Como no hubo entendimiento, se buscará en otra ocasión, y a ser posible de común acuerdo con los dueños.

También quedó sobre la mesa la propuesta del BNG de dedicarle la escuela infantil municipal a Mercedes Romero Abella, maestra represaliada (fusilada en el 36, enterrada en una fosa en Aranga) por el franquismo. Decidieron buscar una ubicación de consenso.