A salvo los cuatro tripulantes del Noeta Primero de Corcubión, que quedó a la deriva a seis millas de Fisterra

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

CORCUBIÓN

Cedido

Uno de los marineros es Urbano Suárez Canosa, patrón mayor de Corcubión. Con él viajaba un hermano, Evaristo

13 nov 2019 . Actualizado a las 00:25 h.

Los cuatro tripulantes del pesquero con base en Corcubión Noeta Primero se encuentran sanos y salvos tras sufrir el pesquero una avería en el motor, que lo dejó a la deriva. El aviso se produjo en torno a las dos y media de la tarde de este martes, cuando Salvamento Marítimo activó la alerta. La embarcación se encontraba por aquel entonces entre el Cabo Fisterra y Cabo da Nave, a unas 6 millas de la costa fisterrana y a unas 18 de Camariñas.

Algunos pesqueros que faenaban por la zona trataron de auxiliar y remolcar a puerto al Noeta Primero, pero el fuerte mar de fondo, con olas de 6-7 metros en la zona, imposibilitó la operación y la tripulación del Noeta Primero esperó a la llegada de la embarcación Salvamar Altair, que tardó una hora y media en alcanzar al pesquero averiado. Las tareas de remolcado fueron muy complicadas debido al mal estado del mar. De hecho, la Salvamar Altair tardó más de dos horas en arribar al puerto de Corcubión. Los cuatro tripulantes, entre ellos, el patrón mayor de Corcubión, Urbano Suárez Canosa, y su hermano, Evaristo, se encontraban bien de salud. De los otros dos compañeros solo trascendieron sus nombres: Constante y Manuel, ambos vecinos de Fisterra.

Al xurelo y la merluza

Una hija del patrón mayor y también tripulante del pesquero (está de baja por maternidad), Jenifer Suárez Silva, explicó que el barco había salido a faenar sobre las dos y media de la madrugada de ayer y que iba a la volantilla, xurelo y merluza, principalmente.

El Noeta Primero es un barco de casco de madera, de unos 14 metros de eslora y tiene unos 18 años de antigüedad (fue matriculado en el 2002).