Corcubión se deshace de grandes atentados contra su imagen urbana

Juan Ventura Lado Alvela
j. v. lado CEE / LA VOZ

CORCUBIÓN

JORGE PARRI

El edificio que destroza la vista de la praza Castelao acogerá apartamentos turísticos

17 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Corcubión lleva a gala y con motivo ser la localidad mejor conservada de la Costa da Morte. Un título que llevaba años empañado por atentados estéticos concretos en sitios claves de la villa, que afectaban a la imagen global de los puntos centrales del casco urbano. Despropósitos que en los últimos meses se han corregido o están a punto de corregirse para darle una nueva vista al casco histórico por antonomasia de la zona.

No es que de repente se hayan volado las aberraciones urbanísticas de Quenxe o que las numerosas ruinas fuesen rehabilitadas de un plumazo, ni siquiera que el hotel El Hórreo reviviese su época más lustrosa; pero sí se han sucedido tres actuaciones importantes: la casa rectoral, el solar del cine y ahora el edificio de la praza Castelao, que llevan lustros atascadas, arrastrando todo tipo de polémicas incluso judiciales y políticas.

El último de esos cambios puede verse en estos mismos momentos con el inicio de las obras del tristemente célebre edificio de la esquina de la praza Castelao con el callejón del mismo nombre. La vulneración de las normas urbanísticas en su ampliación lo tenía paralizado y, además, con un interior de ladrillo a la vista que incluso fue empleado para una llamativa pintada gigante. Ahora, después de infinitos trámites por parte de la propiedad y también del Concello, luce en la fachada la grúa y la licencia de obra, pensada para marcar un antes y un después en este edificio. Concretamente, pasar de una piedra estética en el corazón de Corcubión a un privilegiado conjunto de apartamentos turísticos repartidos en planta baja, primero, segundo y bajo cubierta. Eso sí, con una inversión importante para devolver el inmueble al aspecto más parecido al original recogido en su ficha arquitectónica. El plazo legal para hacerlo es de tres años, pero fuentes municipales señalan que las promotoras, que sacaron la obra a concurso y la ganó Construcciones Marcos, tienen previsto abrir el establecimiento de cara al verano.

Esta actuación se suma a otra que apenas lleva unas semanas terminada y que ejecutó Construcciones Búa por encargo del Concello: la regeneración del conocido como solar del cine, también en la propia plaza Castelao, que, por el momento, básicamente se ha rellenado con tierra y poco más pero ya cambió de manera sensible el aspecto del entorno. Hicieron falta cerca de 40 camiones de tierra y la inversión se elevó hasta los 20.000 euros, que puede parecer una cantidad pequeña hablando de obra pública, pero en Corcubión supone mucho dinero.

«A nós calquera cousa nos custa un mundo, porque, por territorio e por poboación, nunca nos favorece o reparto de fondos. E hai unha cousa que non entenden na Xunta e mesmo na Deputación, que é que somos cabeza de partido xudicial, e iso implica que todo o mundo, por un motivo ou por outro, ten que vir a Corcubión, e que nós temos que manter máis servizos que noutros sitios con menos recursos», reclama el alcalde, Manuel Insua. Recuerda que estos casos del solar, el edificio y la casa rectoral que había sido ampliada ilegalmente, fueron tres objetivos que se marcó como centrales y en los que, además, se puso a trabajar nada más ser elegido alcalde, con lo que celebra especialmente que, al menos en esto, haya podido cumplir con lo esperado. Ahora, si le vuelven a elegir confía que, «aínda que sexa por fases», poder desarrollar «un proxectiño interesante para facer da Castelao unha verdadeira praza en lugar dun cruzamento de camiños».

El deterioro del museo marítimo afecta incluso a la seguridad

Al margen de cuestiones más administrativas, como abrir el centro de día, el principal reto en cuanto a inmuebles urbanos es el mantenimiento del Museo Marítimo Seno de Corcubión. Si hace solo unas semanas saltaron todas las alarmas por la retirada de fondos para utilizarlos en una exposición temporal en Vigo, ahora lo que llama la atención es el rampante deterioro del inmueble que implica incluso problemas de seguridad.

Era conocido el deficiente estado de la cubierta que hacía que, ya en tiempos de Neria, valiosos archivos náuticos estuviesen guardados en un ambiente de humedad rampante, al margen de que en algunas zonas llovía directamente sobre las piezas. Sin embargo, ahora se ha detectado la caída de tejas hacia la zona del paseo, en la parte trasera del museo, lo que evidencia todavía más la situación límite en la que se encuentra.

El casco histórico aún tiene otras asignaturas pendientes

Los problemas más o menos resueltos no significa que en Corcubión hayan desaparecido las asignaturas pendientes, porque las hay y muchas, algunas patatas calientes como el del hotel El Hórreo, que implica incluso problemas de seguridad aparte de convertir un referente en un ruina.

Pero hay otros asuntos más recientes, que aunque vienen de lejos, quedan ahora más al descubierto, como el problema con los postes y los cables del entorno del solar del cine que, una vez acondicionada la zona, llaman especialmente la atención. El Concello ya se hizo cargo de uno de los báculos y lleva tiempo guerreando con las compañías de servicios para completar la actuación pero, como dijo el alcalde, Manuel Insua, en el último pleno, «son intocables» y resulta más que complicado que se hagan cargo de subsanar deficiencias. Tampoco la Administración local puede actuar por su cuenta porque las empresas tienen derechos adquiridos y quitarles o cambiar de sitio un poste podría acarrear consecuencias. El otro gran caballo de batalla es el paseo marítimo no que «arranxas dúas plaquetas e rompen outras tantas», explica Insua, con lo resulta complejo tenerlo al día.