Denuncian una carga de competencias impropias sin acompañamiento financiero
19 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Los alcaldes de Soneira y Fisterra celebraron en Corcubión su tercera reunión después de las de Muxía y Camariñas, esta vez sin el regidor de Cee, Ramón Vigo, que se ausentó por un asunto de salud, pero con la presencia del presidente de la Fegamp, Alfredo García, al que le transmitieron sus inquietudes ante «o esquecemento e desatención que sofren os concellos por parte do goberno de Santiago».
Los regidores pretenden que esta organización pensada para defender los intereses municipales sirva de puente y forma de presión con la Xunta a la que acusan de derivar sus responsabilidades sobre unas administraciones locales «sobrecargadas de competencias para as que non se dotan recursos económicos suficientes, cando non son nulos».
Entre los temas principales del encuentro destacaron, de nuevo, la política de Augas de Galicias, la del Consorcio Galego de Servizos de Igualdade e Benestar, la lentitud administrativa, la nueva normativa de incendios o el problema de los perros abandonados. Además, los alcaldes denunciaron una «distribución clientelar» del canon de saneamiento.
Respecto a Augas, el alcalde de Corcubión, Manuel Insua, que ejerce como portavoz en este caso por su condición de anfitrión, señala que «este ente limita a súa xestión á apertura de expedientes sancionadores de forma sistemática a un concellos que non contan con recursos para afrontar, as máis das veces, obras hidráulicas de orzamentos inasumibles». En cuanto a la ayuda a domicilio, destaca que, si bien es cierto que Benestar ha incrementado la asignación de recursos a los municipios, se trata de una competencia que es exclusivamente autonómica, la financiación sigue resultando insuficiente y eso da lugar a listas de espera. Respecto a la regulación de las masas forestales, todos los regidores coincidieron en que «por parte do goberno galego lévase unha política errática neste ámbito. Non existe planificación e ordenación forestal» por lo que se actúa «cunha política precipitada e reactiva» en la que «outra vez se pretende descargar nos concellos as responsabilidades».
También señalaron que la legislación sobre el abandono de mascotas se ha hecho desde una óptica «descoñecedora da realidade á que vai dirixida» y manifestaron conjuntamente que su percepción es «de abandono dos concellos por parte da Administración Galega», algo que tachan de «preocupante».