Tiempo de emigración para los más pequeños

Luis Lamela

CORCUBIÓN

Tiro Trillo marchó para Argentina con sus padres siendo muy niño

04 may 2017 . Actualizado a las 04:00 h.

Nacido en Cee, hijo de Tirso Trillo, de Corcubión, y de Antonia Caamaño, natural de la villa de A Xunqueira, Tirso Pedro Trillo Caamaño emigró siendo muy niño para Argentina, país en el que sus padres le dieron dos hermanos más: Francisco, nacido en febrero de 1926, y Paulina, al año siguiente. Precisamente en 1927 su padre sufrió un accidente laboral con una máquina de la carpintería de su propiedad perdiendo varias falanges de la mano derecha.

Tras el suceso, la familia viajó a España y, después de varios meses de estancia en su tierra, regresó a Buenos Aires acompañada de Dolores y Emilio Caamaño, de 12 y 11 años, respectivamente, embarcando en A Coruña en el vapor Monte Olivia para arribar a la capital argentina el 4 de marzo de 1928, regresando el niño ceense, con 5 años, al nuevo mundo sin conciencia aún de los quiebros que el tiempo le obligaría a dar.

Nada sabía de abrir surcos y de esparcir semillas y no imaginaba el incierto futuro que le esperaba, pero se integró rápidamente en la nueva cultura y sociedad del país de destino. Cee, su pueblo y el de su madre, y el de Corcubión, el de su padre, con el tiempo quizás quedaron en las evocaciones de sus progenitores que se perdieron seguramente cuando ellos faltaron. «Con la desaparición de los padres desapareció en gran medida el lazo espiritual que unía a la tierra originaria de sus ascendientes, de la que incluso llegan, algunos, a olvidar su nombre al poco tiempo de su separación, y aún no siendo así, es rarísimo que lo recuerden los que siguen a su generación...» (párrafo de un editorial de la revista Alborada, de marzo-abril de 1935).