El gasoil del colegio de Quenxe cierra al marisqueo la ría de Corcubión

Juan Ventura Lado Alvela
J. v. lado CEE / LA VOZ

CORCUBIÓN

XESÚS BÚA

La Xunta ha decretado el nivel mínimo de alerta por contaminación en la zona

22 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El Intecmar, el laboratorio profesional que regula y habilita la extracción de marisco en Galicia, ha acordado cerrar la zona media e interna de la ría de Corcubión, debido al vertido de gasoil procedente del colegio Praia de Quenxe, que durante el fin de la semana pasada y el inicio de esta se ha ido filtrando a través del terreno y de las canalizaciones del saneamiento hasta el agua.

Por su parte, Salvamento Marítimo tiene activado desde las 10.30 horas de ayer el Plan Territorial de Contaminación Mariña Accidental de Galicia (CAMGAL) en situación 1, que es el nivel de alerta más bajo, ya que el vertido se considera de «pequenas dimensións», como aclaró ayer una portavoz de la Xunta de Galicia.

Esta declaración trajo aparejadas una serie de medidas que ya habían iniciado el martes, pero que continuaron ayer, pese a que, en principio, no se sabía si iban a ser necesarias. Sin embargo, dado que el diésel volvió a hacer acto de presencia en el agua, personal de Salvamento y Gardacostas, a bordo de dos embarcaciones auxiliares del buque García Nodal y del remolcador Don Inda, ambos amarrados en el muelle de Brens, extendieron por el lugar barreras y mantas anticontaminación destinadas a absorber y dispersar la mancha de combustible en el agua.

La Axencia Galega de Emerxencias (AXEGA) informa de que el vertido está concentrado y localizado en una extensión aproximada de dos kilómetros cuadrados y, aunque se ha prohibido el marisqueo de manera preventiva, los bancos no se abrían visto afectados. A este respecto, cabe recordar que lo que se extrae en la ría de Corcubión son fundamentalmente bivalvos (longueirón, navaja, berberecho) que viven enterrados en la arena y, dado que el gasoil flota sobre el agua su capacidad de afectación es baja, ante un vertido de estas dimensiones.

Sin embargo, también señalan desde los distintos organismos implicados en el control de este episodio de contaminación que donde sí se aprecia el efecto del diésel es fundamentalmente en la playa de Quenxe, la más próxima a la calle Maruxa Mallo, en la que está ubicada el colegio, de cuyo depósito de la calefacción procede el vertido.

Por todo ello, la AXEGA aclara que la activación de este protocolo de seguridad tiene carácter preventivo para dar «una respuesta más ágil y coordinada ante este episodio de contaminación, teniendo como principal objetivo la máxima protección de las personas, el ambiente y los bienes que puedan resultar afectados por el vertido».

No hay por tanto motivos para la alarma, como ya indicaban el martes sobre el terreno técnicos de Gardacostas, aunque es preciso tener en cuenta que puede seguir brotando combustible del terreno y filtrando hacia el mar durante varios días. De hecho, ayer desde la Xunta señalaban que resulta muy complicado realizar una predicción sobre cuando el problema podrá estar resulto del todo.

Al margen de todos los organismos citados, también ha sido movilizado personal de Augas de Galicia, agentes medioambientales e incluso técnicos de la Consellería de Educación. Entre los trabajos a realizar tenían previsto evaluar la situación del depósito, que tiene unos 24 años y está enterrado, para poder repararlo antes de que se reanuden las clases después de las vacaciones de Navidad.