Formoso pide a Naturgy «responsabilidade co territorio»

La Voz CARBALLO / LA VOZ

CERCEDA

ANA GARCIA

Por su parte, el PP de Cerceda dice que Liñares no mueve ni un dedo para evitar el cierre de la térmica

19 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El presidente de la Diputación de A Coruña, Valentín González Formoso, ha reclamado a la multinacional Naturgy «compromiso con Galicia» y «responsabilidade social con Cerceda, cos traballadores da compañía e co territorio que durante décadas acolleu unha das principais centrais de produción de enerxía eléctrica de Galicia».

Lo hace ante la decisión de la compañía de echar el cierre de la planta térmica de Meirama después de casi 40 años de actividad y la pérdida de 150 puestos de trabajo, entre directos e indirectos.

Un plan realista

También demanda a Naturgy que «poña enriba da mesa un plan alternativo realista e consistente que sexa validado polo Estado, a Xunta e o Concello de Cerceda». Y añadió: «Un plan que compense o impacto socieconómico e laboral que terá a perda da central para o municipio» y que tenga en cuenta «o esforzo que fixo Cerceda para acoller esta instalación» en su día.

El presidente de la Diputación, Valentín González Formoso, advirtió de que «o peche da central vai supoñer una nova suba no prezo da electricidade, que xa acumula unha suba dun 40 % nas primeiras semanas do ano».

El PP de Cerceda dice que el regidor no «mueve ni un dedo»

El portavoz y candidato del PP a la alcaldía de Cerceda, Francisco Santos, criticó el «pasotismo» mostrado por el alcalde, José García Liñares, tras confirmarse el cierre de la planta de Meirama, y censuró la «dejadez e inacción» mostrado durante meses por el regidor, al que echó en cara no haber hecho «absolutamente nada» por impedir el cierre de la factoría.

«Es intolerable que un alcalde, que hace tiempo que conoce la posibilidad de que se pueda llevar a cabo el cierre, no mueva ni un dedo para buscar una solución», dijo el edil popular, quien, aseguró que «todavía es mucho peor que, ahora que se ha confirmado la noticia, se resigne ante la pérdida de uno de los motores económicos del Concello de Cerceda». En este sentido, el concejal no dudó en calificar de «hipócrita» las quejas de un alcalde «que, lejos de hacer algo para impedir el cierre o minimizar sus consecuencias, se permite el lujo de quedarse de brazos cruzados sin hacer nada». Y añadió: «Lo mínimo que se espera de un regidor es que se reúna con la empresa o le pida al Gobierno algún tipo de alternativa que garantice un plan económico y social para los cientos de personas afectadas».