La caída de nacimientos en el hospital de Cee evidencia el drama poblacional

Juan Ventura Lado Alvela
j. v. lado CEE / LA VOZ

CEE

Los partos anuales se han reducido casi en un centenar desde el récord del 2004

06 ene 2019 . Actualizado a las 17:33 h.

Explica esta misma semana José Casias, el padre de Sofía, el primer bebé nacido en el 2019 en el Hospital Virxe da Xunqueira (HVX) de Cee, que tener hijos para una mujer como su pareja, trabajadora autónoma, es algo más que un reto porque en menos de cuatro meses tiene que estar otra vez en el trabajo. Es solo un ejemplo, pero ilustra una de las múltiples realidades que hacen que los datos de nacimientos del pasado 2018 en el HVX sean verdaderamente dramáticos, como reconoce el jefe de Ginecología, Íñigo Montesino, que empezó a notarlo ya desde inicios de año y lo incluso en las primeras consultas de embarazadas que también se han reducido de manera alarmante. No en vano, no recuerda nada parecido desde inicios de la década pasada, porque los 174 partos del 2018, entre ellos 36 de mujeres de fuera del área de influencia -lo que sigue hablando muy bien del servicio prestado-, son la cifra más baja de toda la serie reciente, lejos de los 220 del 2017, los 238 del 2016 y mucho más del récord de 260 marcado en el 2004.

Las causas, en palabras de Montesino, son económicas, sociales e incluso generacionales, pero pintan un panorama verdaderamente desolador para la realidad demográfica de la Costa da Morte. «La gente joven de la comarca se mueve a donde hay trabajo, a las ciudades, a fuera... Luego las mujeres que ahora están en edad de ser madres nacieron, fundamentalmente de mitad de los 80 a mitad de los 90, que ya fue una época de baja natalidad, porque lo que, en realidad, hay pocas. A todo eso hay que sumar que aquí la tan cacareada recuperación económica no acaba de llegar y los sueldos que hay tampoco proporcionan esa estabilidad que puede animar a la gente a tener hijos. Además, como cada vez se retrasa más la edad para tener el primero luego las posibilidades de tener más cada vez son menores», detalla Montesino, que lleva en el hospital prácticamente desde los inicios, es todo un referente para las familias de la zona y conoce perfectamente la realidad comarcal.

Un servicio apreciado

Al margen de que, como es lógico, poco pueden hacer desde el hospital por el fomento de la natalidad, el servicio del Virxe da Xunqueira en esta campo, es de los mejor valorados del sistema autonómico, por lo que, aunque bajan, como todas siguen siendo significativas las cifras de mujeres de fuera del área de influencia, aunque de dentro de la misma área sanitaria o de otras próximas como la de Santiago, que eligen el HVX, para dar a luz. Para los profesionales del servicio es un espaldarazo a su labor y a los técnicas lo menos invasivas posible que llevan años aplicando, pero eso no compensa la desazón generalizada que se vive en este y en otros muchos servicios públicos de la zona, donde el descenso y el envejecimiento poblacional se nota con virulencia.