El intercambio de culpas y de cuentas pendientes solo lo rompe la unánime repulsa a la violencia machista
02 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Además de aprender a levantar bien la mano, previa reprimenda de la secretaria, los concejales de Cee celebraron en el pleno ordinario del viernes por la noche el primer mitin polifónico de las municipales que se celebrarán -quién lo diría- dentro de 177 días.
Primero despacharon con un «falta de legitimación activa», como dice el informe jurídico y recalcó Margarita Lamela, el recurso presentado por el excandidato a la alcaldía Víctor Somoza contra el acuerdo por el adjudicaron la piscina municipal. Y a partir de ahí, después de un par de demostraciones de concordia en contra de la lacra de la violencia machista, abrieron fuego a cuenta del alumbrado navideño, del centro médico, la seguridad en los pasos de peatones, la atención pediátrica, el trato de la Xunta a la Costa da Morte, la tarifa eléctrica, las declaraciones de los que forman parte del pleno y de los que no... Todo les iba sirviendo para ir colando a cada cuál su mensaje, derivar culpas al contrario y, en buena medida, ajustar cuentas internas.
Dos de las más llamativas las protagonizó el ex del PSOE Modesto Rivas. Primero echó por tierra, con una prolija sucesión de datos, la propuesta del BNG para justificar una tarifa eléctrica gallega, en base a que la comunidad es exportadora de energía. Puso en evidencia que hay otras siete excedentarias y, entre todas, Galicia es de las que menos exporta, con lo que más vale «seguir defendiendo el sistema de solidaridad». Pero con lo que verdaderamente levantó ampollas, fue al recordarle a su ex jefa de filas, Margarita Lamela, lo que había dicho en el pleno del 30 de septiembre del 2016, respecto a la situación de Neria, ahora que el caso se ha archivado.
Lejos de cogerla por sorpresa -«Sabía que iba a sacar ese tema», Lamela se hizo eco de un informe de control financiero definitivo de Neria del pasado 12 de junio, en el que no solo se da cuenta de que se deben cerca de dos millones de euros, sino que desde el 31 de mayo del 2014 siguió saliendo dinero de las cuentas, en ocasiones con reintegros en efectivos sin documentación «que aclare o justifique dichos reintegros». Lo hizo, sobre todo, para echarle en cara al alcalde, Ramón Vigo, que no presentase el informe a la corporación.
Nueva portavoz del PP
«Estoy convencido de que esta sentencia no le gusta», le replicó, sin dar más explicaciones, el regidor, que la acusó de «judicializar la vida política», algo que «a veces sale bien y otras no». Acusación que quiso rebatir Lamela, al afirmar que todo lo que le atribuyen y critican no fue más que «llevar unos hechos a Fiscalía», algo que, por otra parte, también hicieron «técnicos del Concello», en un caso que ni uno ni otros aclararon. Solo Vigo, aprovechó para remachar que eso es «menos valiente que poner una querella».
En su estreno oficial como portavoz del PP, Águeda Díaz también sacó el revolver, con diferente éxito en la puntería. Las luces de Navidad le sirvieron para evidenciar que en este año preelectoral se van a encender antes, el jueves para ser exactos; pero la argumentación de los problemas con los pediatras y el centro de salud, le dejó a Vigo en bandeja poner de manifiesto los incumplimientos de la Xunta. Ya por último, la petición de seguridad en los pasos de peatones, en carreteras que son autonómicas, abrieron la descarga de Serxio Domínguez, que llegó incluso a decirle que los concejales del PP de la Costa da Morte, deberían tomar ejemplo de su compañera de Viveiro, que dimitió por la falta de inversiones de la Xunta.
La refriega era ayer interpretada por el PP de Cee, como ejemplo de que la nueva portavocía había logrado situar a los populares «como eje de la política local», hasta el punto de que «el BNG ya no disimula que no hace oposición al gobierno» y «Vigo ya ve fantasmas», en una supuesta confusión de Díaz con el candidato, Antonio Domínguez.
Las perlas del debate
Intervenciones prosaicas, humorísticas y hasta panegíricas:
Margarita Lamela a Vigo, a cuenta de por qué ahora sí puso la caldera del ambulatorio: «¿Le bajó la sensación térmica o le subió la electoral?».
Águeda Díaz pide seguridad en los pasos de peatones «sin ánimo de hacer política». Vigo: «isto é política» y Serxio Domínguez: «Eu veño aquí a facer política». «Pues yo no vengo a jugar a las cartas», responde Díaz.
Serxio Domínguez a Águeda Díaz: «Admiro a Águeda por defender o indefendible [...] A Costa da Morte está morrendo. Vostedes teñen a responsabilidade de dicirlle aos seus que ‘esto se va al garete’».
Vigo a la portavoz del PP: «Lo de sitiar a un alcalde para dar impresión de falta de gestión... valía en las guerras púnicas, pero ya no. Va siempre de vuelta para quien va de esa manera, y su partido tiene este defecto. Como tiene 200 y pico concellos, tiene mucho que repartir entre los suyos y no se nota».
Vigo, sobre Antonio Domínguez: «Llega el salvador y se soluciona todo, pero es imposible lo que trasladó [quitar el canon de la piscina]. No se puede hacer, pero lo afirma con una facilidad pasmosa. Parecen comentarios hechos desde la hamaca».
Modesto Rivas felicita a Vigo porque se archivase la investigación en relación a Neria y le dice que muchos esperaban que «entonase el mea culpa» y en lugar de eso lo que puede entonar es «un jubiloso aleluya».
Lamela a su excompañero Rivas: «No sabemos si el señor Rivas es portavoz de IxCee o concejal no adscrito».