La solidaridad de la comarca echa raíces en Costa de Marfil y Perú

x. ameixeiras / p. blanco CARBALLO / LA VOZ

CEE

MARCOS RODRIGUEZ

Égueire sigue con sus planes para crear un dispensario y granjas comunitarias

22 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La solidaridad no debe tener fronteras. Así al menos lo entienden los promotores de dos grandes proyectos de la Costa da Morte que tienen sus efectos frente al Atlántico Sur o frente al Pacífico. El primero de ellos es el promovido por Égueire. Contigo construimos futuro es el lema de esta entidad cuya cabeza visible en esta comarca es el párroco de Cee, Brens y Ameixenda, Desiré Kouakou, que lucha por que las gentes de Costa de Marfil puedan vivir con salud y dignidad. El otro plan es el de Cáritas de Soneira, con la presidenta Carmen García al frente, y los sacerdotes Francisco Gómez-Canoura y Alejandro Martínez Touriñán de apoyo. Su colaboración en este caso es con la comunidad de las Carmelitas Misioneras para que niños de Chimbote y Villa María, en Perú ambas localizaciones, puedan superar la muralla de la pobreza.

Égueire inauguró en el pasado mes de noviembre una maternidad en Nandibou, en la región marfileña de Gran Lahou. Fue una conquista de la entidad, que este año conmemorará su décimo aniversario. Con este gran centro, Desiré y sus colaboradores esperan poner fin a la lacra de muertes de mujeres y bebés por falta de atención en los partos. Estuvo allí aquel día el embajador español, Luis Prados Covarrubias. Un millar de personas fueron testigos de esa jornada de esperanza. Sin embargo, la labor de Desiré y Égueire no se detiene, como tampoco las necesidades de aquellas tierras. Ahora su objetivo es hacer un dispensario médico, para que el que cuentan con la ayuda de Manos Unidas. Además, fiel a la filosofía de no solo entregarle el pez al hambriento sino de enseñarle a pescar, Kouakou se halla inmerso en el plan de crear una pequeña granja de cerdos y otra de pollos dirigida por dos jóvenes formados en Fonteboa, Coristanco. Será en Mn’ Zida. Junto con las granjas proyecta una especie de piscifactoría. La explicación para ello es que las mujeres que reciben los microcréditos para comercialización de pescado quedan paradas durante cuatro meses. «Y se quedan sin nada», explica el sacerdote.

Es posible ayudarle acudiendo el día 10 de febrero al Cocido Solidario que tienen organizado en el restaurante Pastoriza de Vimianzo. Las entradas, a 25 euros, están a la venta. Además, en marzo, un diseñador marfileño participará en la Mostra do Encaixe, habrá una publicación de cuentos ilustrados, una exposición de Marcos Rodríguez y la Festa africana, en julio. Ocasiones para ayudar.

La ayuda de Zas va dirigida a niños en las poblaciones de Chimbote y Villa María

En Chimbote y Villa María (Perú) hay niños que carecen de las mínimas oportunidades. «Non teñen nada e andan detrás de ti», cuenta Carmen García Martínez, que los visitó más de una vez. La idea de Cáritas de Soneira es llenarlos de ilusión y de futuro, y encontraron una forma muy práctica y divertida de hacerlo. Como desde hace años, organizan la Cena Solidaria del primer viernes de cuaresma en el polideportivo de Zas.

La convocatoria ya está lista. Está fijada para el 16 de febrero. El menú, ya clásico, incluye arroz con salsa de champiñones y bacalao con patatas. Son los platos de la satisfacción. Por solo 15 euros y diversión a raudales. Los niños pagarán solo cinco y hay una fila cero para los que quieran colaborar y no tengan posibilidad de asistir. Centenares de personas, casi mil, se juntan en el pabellón de la solidaridad. La compañía es inmejorable, al igual que en el Cocido Solidario de Égueire. Sirve el restaurante-pizzería Tívoli, pero, según el párroco zasense, necesitan 50 voluntarios, así que la lista está abierta para los que quieran echar una mano.

Tanto Francisco Gómez-Conoura como Alejandro Martínez Touriñán están encantados con la convocatoria, que es anterior a su llegada a sus respectivas parroquias. Alaban, por descontado, el trabajo de sus colaboradoras en Cáritas. Desiré, por su parte, está muy orgulloso de todo lo conseguido sin subvenciones. Todo lo que han logrado es con iniciativas para la participación voluntaria de la gente.

Solidaridad que no entiende de fronteras

Jose Manuel Casal

«Un niño, un lápiz», campaña surgida a raíz de un Dakar

Al menos diez años lleva el carballés Kiko Rojo impulsando la campaña «Un niño, un lápiz». Material escolar, ropa, juguetes... con lo recaudado acuden al norte de África. Empezó en el 2006, tras un viaje a Marruecos haciendo el seguimiento fotográfico del Dakar.

El Lemán a nado por los niños y envío de material escolar

Este pasado verano Adrián García, estudiante en Ginebra (Suiza) e hijo de un carballés, cruzó el lago Lemán para recaudar fondos destinados a niños de Zimbabue. Desde Fisterra, con la ONG Miradas del Mundo, se envió material escolar y deportivo a Guinea-Bisáu.

José Manuel Casal

Unas «Vacaciones en paz» de la mano de la entidad SOGAPS

Desde un campo de refugiados en el desierto, con unas temperaturas extremas, a la frescura de la Costa da Morte. El programa «Vacaciones en paz» trae en verano a niños saharauis a estas tierras, gracias a la asociación Solidariedade Galega co Pobo Saharaui.

Jose Manuel Casal

Mercadillo en el Monte Neme a favor del proyecto Bubisher

Alumnos del Monte Neme carballés recibieron a inicios del 2017 a Gonzalo Moure Trenor después de haber organizado un mercadillo en favor del proyecto Bubisher, del que él es impulsor. Trata de que los niños de los campos de refugiados del Sáhara puedan acceder a libros de lectura.