El gimnasta de élite que siempre fue payaso: Wilbur llega a Carballo

P. Blanco, F. Rodríguez CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

La Rúa dos Contos del FIOT se despedirá este sábado en el mercado con «Piensa en Wilbur». Así habla su creador, Víctor Ortiz. Tal vez lo conozca también del Grand Prix

28 oct 2023 . Actualizado a las 00:11 h.

El apartado más gamberro del FIOT de Carballo, la Rúa dos Contos, se despedirá este sábado, 28 de octubre, a las 23.00 horas, con el estreno en Galicia de la pieza Piensa en Wilbur, en el mercado municipal. Interpretación y guion corren a cargo de Víctor Ortiz, precisamente Wilbur, quien conversó acerca del espectáculo en Radio Voz

-Tiene tantas aristas esta obra que vamos a empezar por dos palabras que llaman la atención: «Brutalmente tierno».

-Es un cóctel de todas las cositas que a mí me gusta hacer, y lo llevamos a un personaje, que es Wilbur, y que, sí, es brutalmente tierno. Trabajo los contrastes, es muy excéntrico, pero tiene un fondo bueno, sano, con valores. Esa mezcla es el show. Hago acrobacia, gimnasia, canto, baile, hay monólogo, circo... Un mix de todo lo que me gusta, como digo.

-Fue usted, hay que recordarlo, gimnasta de alta competición. 

-Bueno, me mantengo. Lo fui muchos años, empecé a los seis y me retiré a los 22/23. Fui deportista de élite, en concreto de gimnasia artística.

-Trae a Carballo acrobacias, humor y mucho riesgo. Situaciones imposibles para quedarse pasmado. ¿Habrá alguien en peligro?

-¡Igual la primera fila! [ríe]. Todo lo que hago está muy pensado, pero en el circo siempre está ese riesgo, y el show tiene mucho de circo. Por ese filo va.

-A nivel mensaje, ¿qué ha querido contar 'Piensa en Wilbur'?

-Es un espectáculo con valores, familiar, para todos los públicos, que reparte para todos. Para el adulto, que se lo pasa bien, y para el niño también. El mensaje es sano. Como yo tengo este fondo y principios de deportista, el personaje también lo es. Lleva intrínseco el deporte, fruta y deporte a puñados, ser un motivado de la vida sana, digamos. Son mis valores también, pero en este caso lo maneja todo Wilbur.

-¿Cómo fue que un deportista descubrió su pasión por el clown y el humor? Usted acabó como acróbata del Circo del Sol.

-Lo primero que fui en mi vida fue payaso, eso seguro. Incluso antes de empezar con la gimnasia, y eso que empecé pronto. Al retirarme vi a una persona en un show de calle, me encantó y pensé: Hala, si a esto te puedes dedicar! Fui a tiro hecho. Al Circo de Sol iba como acróbata, tuve con ellos cuatro o cinco intervenciones, pero realmente me gustaba más hacer el clown y el payaso. Así que me fui a Madrid, a tener allí mi compañía pequeñita, y a dedicarme a hacer el bobo, vamos, básicamente, hasta hoy.

-Hablábamos hace unas horas de la fusión de danza y teatro. ¿Y las acrobacias y la gimnasia? ¿Qué poder narrador les ve sobre un escenario?

-A mí la gimnasia me lo ha dado todo, a nivel corporal. Tienes una flexibilidad.... alguna gente me dice que parezco un dibujo animado. Tienes el dominio absoluto del cuerpo, o para el bien, o para el mal, para deformarte. De origen soy tirando a elástico, y la postura corpórea de Wilbur es gracias a todos estos años de haber hecho gimnasia. Mi conocimiento físico y motriz lo lleva el personaje, claro.

-¿A qué público le gustaría llegar con esta pieza? ¿Qué espera ver en el mercado de Carballo?

-Todos mis shows son familiares. No es un espectáculo infantil, así que lo que más me gusta ver es a la familia completa en el teatro.

-Es usted un auténtinco fenómeno viral en las redes. También nos trae de vuelta la nostalgia a través del Grand Prix 2023. ¿Son partes del mismo Wilbur?

-Totalmente, y además el personaje es el mismo. Es más, la licra que llevo en el programa es con la que empecé en 'Piensa en Wilbur'. Estoy muy contento con el Grand Prix, toda una experiencia. Me dijeron en una entrevista que habían vuelto así los payasos a la tele, y eso me gustó mucho. ¿Por qué no?