La operación contra las estafas bancarias de Carballo se salda con ocho detenidos y dos investigados

La Voz CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

GUARDIA CIVIL

La parte central de la organización se encuentra en Brasil

30 jun 2022 . Actualizado a las 23:59 h.

La operación Begonias llevada a cabo por el Equipo de la Comandancia de Guardia Civil de A Coruña en colaboración con el Equipo de Milladoiro y Áreas de Investigación de Carballo y Cambre finalizó con la desarticulación de un grupo criminal asentado en Carballo, supeditado a una organización criminal de ámbito internacional dedicado a la ciberdelincuencia, ya que pudo establecer que el craker y parte de la organización del entramado criminal, se encuentra ubicado en Brasil.

El dispositivo de A Coruña, el pasado día 16 de junio de 2022, procedió al registro de tres domicilios en Carballo, y a las detenciones del cabecilla del grupo criminal, natural de Rumania, con los que son ocho los detenidos y dos investigados. Además, se dio cumplimiento a dos órdenes de búsqueda judicial que les constaban a los otros dos inquilinos de uno de los pisos en el momento de practicar los registros domiciliarios. Esta operación, cerrada en la parte del grupo criminal asentado en A Coruña, continúa en el ámbito internacional, puesto que se han solicitado a distintos organismos policiales y judiciales europeos e internacionales ordenes de detenciones de otros implicados.

El grupo criminal, compuesto por 8 personas de distintas nacionalidades (Brasil, Rumanía, España) formaban la base de la estructura de una organización dedicada a las estafas tecnológicas, y más concretamente a la metodología denominada business email compromise (BEC), y en este caso bajo la fórmula de factura, consiste en «el hackeo del ordenador de una empresa, mediante un malware, con el fin de conocer las gestiones que desarrollan con esa dirección, nombre y cargo del usuario y correo electrónico, consiguiendo así los datos financieros confidenciales de la compañía». Una vez que han obtenido la información suplantan la identidad de un responsable que lleve a cabo operaciones corporativas y tras ello empezaban a operar: enviaban correos electrónicos al contable de la empresa, haciéndose pasar por un proveedor habitual, indicándole un número de cuenta bancaria diferente a la habitual donde debían de ingresar los abonos.

A este investigado se le atribuye el papel de retirar de las cuentas corrientes el dinero estafado a las empresas.
A este investigado se le atribuye el papel de retirar de las cuentas corrientes el dinero estafado a las empresas. Ana García

La Operación Begonias, como detalla la Benemérita, comenzó a raíz de recibir varias denuncias, por estafas de la factura, instruidas por distintos cuerpos de seguridad del Estado (Guardia Civil, Policía) de las que se pudo constatar nexos comunes de actuación entre todas ellas. Tras observar las denuncias presentadas en Posadas (Córdoba), Granada, Illescas (Toledo), Moncloa-Aravaca (Madrid), Valladolid, Sagunto (Valencia) y Tavernes Blanques (Valencia), se determinó que los detenidos formaban un grupo criminal perfectamente estructurado, puesto que tenían definidos sus cometidos. 

Estructura

Por una parte el cabecilla, organizaba y coordinaba físicamente al resto de personal vinculado al grupo, siendo el encargado de la captación y control de las mulas de dinero, al ser al que le entregaran el dinero extraído para proceder a la remisión del dinero obtenido ilícitamente a la organización a través de criptomonedas y pasarelas de pago, tras quedarse su parte proporcional.

En un escalón más bajo se encontraba un círculo cercano al cabecilla que le facilitan la labor, ya sea mediante la participación directa en los ilícitos, como recaderos del jefe de grupo en misiones propias (recogida de dinero, acompañamiento de las mulas, así como para usarlos para ocultar o blanquear el dinero obtenido ilícitamente por los ilícitos penales realizando múltiples envíos de dinero. Por último, en el nivel bajo se encontraban las denominadas mulas de dinero, y que son la parte esencial para la ejecución realización de la estafa.

Este nivel estaba presente en la provincia de A Coruña, de la que se nutría el grupo criminal, así como en Brasil, donde se giraba gran parte del dinero obtenido ilícitamente por esta estafa. Las diligencias instruidas fueron remitidas al Juzgado de Instrucción 1 de Granada.