El Concello de Carballo proyecta un gran museo dedicado al grabador Facal

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Ana Garcia

Ocuparía una parte de su casa en el casco urbano carballés, con buena parte de su obra artística. De momento, los técnicos realizan un estudio de costes

27 feb 2022 . Actualizado a las 23:45 h.

El Concello de Carballo trabaja en la creación de un gran museo dedicado al artista (pintor, grabador, escultor, fotógrafo) Manuel Facal Ponte, que se ubicaría en la casa que tiene en la calle del Sol. No toda, sino el sótano y la planta baja, que albergaría una buena parte de su extensa obra. Es un tema de impacto y que lleva un tiempo gestándose. Está en marcha el estudio de los costes, a cargo de los técnicos municipales, como explican desde el gobierno local. Pero hay que ir paso a paso, y todos firmes. «Creo que sería algo moi interesante, pero unha cousa é o desexo e outra que legalmente se poida asumir, porque teñen que saír as contas», explica el alcalde, Evencio Ferrero. El valor del legado del artista siempre tiene que ser superior al gasto que asuma la Administración local, algo que en este caso parece viable dada la relevancia de sus obras. Facal (Carballo, 1943) acumula una larga trayectoria como creador, con obras expuestas en galerías y museos de Galicia, el resto de España y de ámbito internacional. Sacar el arte a la calle: he ahí otro de sus objetivos. Tiene una profunda huella en Carballo. 

También itinerantes

«Esperemos que todo acabe ben, pero de momento está en marcha esa estimación de custes», apunta el regidor carballés. Y si en efecto sale bien, como parece, Ferrero añade que «sería unha moi boa iniciativa cultural», pero no solo para dar a conocer su obra, sino también otras muestras itinerantes. Facal es el artista más internacional de Carballo (y de la comarca). Lleva mucho asentado en Málaga, pero pasa largos períodos en la capital de Bergantiños. Una ojeada rápida a la hemeroteca devuelve noticias de exposiciones y trabajos muy variados en multitud de lugares, incluido Carballo, como la retrospectiva sobre su obra que organizó hace algo más de tres años la galería Manolo Eirín. Unos meses antes, su exposición Cosidos-Códices ocultos había inaugurado la Bienal de Arte de Cerveira, en Portugal. Y justo antes, sus obras formaron parte de la feria World Art Dubai. Y así, un destino tras otro, un año tras otro, desde hace casi medio siglo sus creaciones han pasado por Nueva York, Puerto Rico, Noruega, Washington, Buenos Aires, Lisboa, Leipzig y otras muchas ciudades, entre ellas las principales españolas.

Grama, una de sus primeras serigrafías, donada para el Fórum carballés
Grama, una de sus primeras serigrafías, donada para el Fórum carballés

Recorrió mundo desde muy joven, incluso desde que de adolescente empezó a estudiar en los Xesuítas de Vigo. A los 16 años ya pudo ir a la efervescente Francia, y más tarde pasaría por Vigo, Barcelona, Londres o Puerto Rico. En esta isla centroamericana, además de impartir clases de arte, cursó la carrera de Filosofía. El mar, también el carballés, ha sido un influjo constante en su densa obra.

El único carballés vivo que tiene una calle con su nombre

Manuel Facal es el único carballés vivo que tiene en un municipio una calle a él dedicada. Une la Vila de Negreira con la Gran Vía, y es paralela a las de otros dos artistas vinculados a Bergantiños, Álvarez de Sotomayor y Urbano Lugrís. Fue aprobada en por la corporación carballesa en un pleno celebrado en 1990, y comenzó a ser oficial el 1 de marzo de 1991, en una época en la que ya tenía exposiciones en numerosos países europeos y americanos.

Por esa época ya tenía su vida establecida en Benagalbón, en Rincón de la Victoria (Málaga), a donde llegó a mediados de los años 80. Ya entonces tenía un nombre con letras mayúsculas en el mundo del arte, e incluso había realizado grabados para artistas como Miró. En una entrevista en La Voz en 1995, destacaba que el trabajo con ese autor balear, durante unos años, le influyó mucho. Y también hablaba de sus inicios, desde su Carballo natal al primer viaje a Londres en el que, más o menos, tras estudiar y el contacto con otros artistas, se afianzó su vocación plástica.