Hostelería de Carballo nace como entidad con más de cien socios

Ayer hizo cuatro semanas que una conversación por el grupo de wasap que tienen los hosteleros de Carballo dio lugar a la creación de una asociación sectorial que nació legalmente el miércoles. Fue Juan Pazos, del Sinagoga, el que dio el primer paso y no tuvo ningún problema para formar una junta directiva con representantes de los locales más emblemáticos del municipio.

Este fin de semana se convocará a todos los que están en el grupo, que son más de cien, para que se pasen a la asociación. De momento, ninguno se ha retirado y todos están informados de los trámites. Además de Juan Pazos, están Carlos Brión (Mesón do Pulpo), como vicepresidente; Gonzalo Álvarez (La Bombonera) como secretario; Miguel Giaquinto (Pizzería Vesubio), como tesorero, y José Manuel Vázquez (O Mexillón), como vocal. Todos ellos, recuerda Juan Pazos, acumulan decenios de experiencia en el campo de la hostelería.

Recuerda Juan Pazos que los negocios de este sector son una parte importante de la economía carballesa, pero también que están imbricados con otros como el comercio de todo tipo. «É unha cadea, un bloque compacto», dice para referirse a la necesidad de actuar todos juntos en un momento en que el coronavirus ha puesto patas arriba la vida de muchos.

Unidad

Con respecto a los objetivos, el principal es tener unidad, lo que favorecerá el mantenimiento de los negocios, pero también poder a acceder a cuestiones que a nivel personal son muy difíciles, como información o formación. «Temos pensado facer moitas cousas», apunta Juan Pazos, pero reconoce que hay que ir paso a paso, viendo las necesidades.

También destaca que no es solo que haya un centenar de locales en la entidad, sino que hay que tener en cuenta la gente que vive de ellos. «Non é só o representante, ao mellor hai catro persoas que viven en parte dese negocio», señala para destacar la importancia de la hostelería en la economía local.

Sobre los motivos que le han llevado a proponer la creación de la asociación, destaca que el principal es que, simplemente, no la había. Reconoce que algunas entidades se han puesto ya en contacto con ellos y que la idea principal es ofrecer servicios y asesoramiento. Para eso se ha pensado en poner una cuota inicial de unos 10 euros, que serían para los gastos, porque los miembros de la directiva trabajarán gratuitamente. Más tarde, en función de cómo se vayan desarrollando las cosas se realizarán otras propuestas.

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