Caión aguarda un año histórico en su Romaría dos Milagres

Patricia Blanco
Patricia blanco CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Una marea de fieles acompañó a la Virgen en subida hacia al santuario, epicentro de esta fiesta declarada de Interese Turístico

02 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

«Hoy es un día glorioso para Caión», decía una vecina a las puertas de la iglesia parroquial de Santa María do Socorro minutos antes de que, tras la misa de las doce, saliese la marea de fieles que acompañaría a la Virxe dos Milagres en procesión hasta el santuario, al ritmo de los cánticos y de la agrupación San Xiao do Trebo, de Cariño. Viento, temperaturas frescas y un cielo algo desapacible tocaron para esta jornada con la que se inicia un año histórico en la romería, toda vez que al caer el día grande, el ocho, en domingo, habrá quince días de oficios religiosos.

Hace semanas que por los márgenes de las carreteras se ven romeros, de día y de noche, en una peregrinación secular que sigue conservándose año tras año y que renueva generaciones. A las seis menos veinte de la mañana, por ejemplo, salieron ayer desde Carballo Iván Anido, Iván Cancela y Lucía Amado. Se mueven entre los 20 y los 21 años y llevan tres haciendo este camino que, antes de las once, ya tenían completado, no sin mojarse: «Choviunos unha hora». Visitaron primero el santuario y bajaron después a la Praza Eduardo Vila Fano, para volver a subir a pie tras la imagen. Aciertan a decir que lo hacen «por tradición», pero también «para pasar o tempo cos amigos, é un día no que intentamos estar todos xuntos».

La devoción está detrás de los pasos de muchos otros devotos que ponen rumbo «aos Milagros». Es el caso de Mariluz Dubra, que también partió de Carballo acompañada por su hermana, María José, y por Pili Barreiro. «É o meu segundo ano ofrecida. Miña avoa, de 92 anos, acaba de pasar por unha operación, e saíu moi ben», contaba ayer mientras subía hacia el santuario. Superó un ictus, una operación de cadera y ahora esta última intervención, así que Mariluz está decidida a caminar hasta Caión «sempre que poida». Declarada Festa de Interese Turístico desde el 2008, la romería de Caión es una amalgama de experiencias personales y también una cita marcada en el calendario de los vecinos.

Imposible cifrar los centenares de personas que ayer se acercaron a la localidad costera y que seguirán goteando hasta el domingo 15, que será el de la procesión de bajada. «Caión está escrito con letras grandes dentro das romaxes de Galicia e é ademais unha das máis fermosas. Temos un trato exquisito tanto por parte do párroco como da xente», valoraba ayer Carlos Rivas desde su puesto de la Cerería Bastavales, donde no dejaban de vender velas a la puerta de la iglesia. Después se trasladaría a la zona del santuario, donde permanecerán todos estos días. «Vimos todos os anos, xa antes de min viña meu pai», detalla. Y eso que son muchas las celebraciones de este tipo, en Galicia, que caen a 8 de septiembre. Cree Rivas que, con 15 días de oficios, los fieles se repartirán más. «Esperamos moitísima xente», comentaba uno de los miembros de la organización a los pies de la imagen. Tres domingos capitales -el de subida, el 8, y el de bajada- «daranlle máis posibilidades á xente que traballa». Luis Pastoriza, veterano párroco, es ayudado estos días por el padre franciscano Juan Antonio. Desde la Peña Royal, responsable de la parte lúdica de las celebraciones, Manel Raposo condicionaba ayer por la tarde a la meteorología el que este 2019 sean unos Milagres de afluencia histórica como así se prevé

Oficios religiosos: A la espera del domingo 8, habrá desde hoy y hasta el sábado misas en el santuario de Os Milagres mañana y tarde. Por la mañana, oficios religiosos a las 10.00, 11.00 y 12.00 horas. Por la tarde, a las 17.00, 18.00, 19.00 y 20.00.