Personal de urgencias del centro sanitario de Carballo se queja de sobrecarga de trabajo e inseguridad

Montse García Iglesias
Montse garcía CARBALLO / LA VOZ SANTIAGO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

El sábado hubo solo un médico durante más de dos horas

24 jun 2019 . Actualizado a las 16:07 h.

Personal de PAC (punto de atención continuada) de Carballo ha hecho pública una nota en la que denuncia que no se están cubriendo bien los servicios sanitarios mínimos, por lo que médicos y enfermeros están sobrecargados de trabajo, pero también demandan mayor seguridad, puesto que en los últimos meses aseguran haber sido objeto de robos y destrozos en sus vehículos «ante lo cual no se ha activado ningún protocolo de actuación».

La situación puede hacerse más complicada durante las fiestas en Carballo. Las noches de los viernes y los sábados hay guardias de seguridad. Según explican, el viernes se pusieron en contacto con la Gerencia de Atención Primaria para poner de manifiesto que hoy y mañana son festivos en el municipio, por lo que esas noches podrían complicarse y no había nada previsto.

Se quejan los trabajadores de que «ni siquiera se dispone de un botón del pánico conectado con las fuerzas de seguridad del Estado». Tampoco hay cámaras ni otro material.

Con respecto a la falta de personal, los trabajadores narran lo ocurrido el sábado. El servicio comienza a las 15.00 horas con tres médicos hasta las 22.00 horas. Dos de ellos continúan hasta las mañana, según fuentes sindicales.

Sin embargo, uno de esos facultativos se sintió indispuesto ya por la mañana y lo comunicó a la Gerencia. Fue sustituido, pero solo hasta las 20.00 horas. Desde esa hora hasta las 22.00 horas hubo un médico menos, que no pudo alargar el turno porque tenía que ir a otro centro de salud, y a partir de esa hora quedó uno nada más. De refuerzo venía otro sanitario, pero se retrasó porque venía de otro PAC.

Así, el único médico que quedó durante más de dos horas tuvo que abandonar el centro para realizar traslados al hospital y atender emergencias, lo que hizo que algunos pacientes «perdieran los nervios, protestando activamente contra los trabajadores».

Explican que tuvieron que ser miembros de la Guardia Civil, que se encontraban en la sala de espera en esos momentos, los que consiguieron calmar la situación, «evitando que la cosa fuera a mayores».

Este tipo de situaciones ya se han dado en otras ocasiones en el PAC de Carballo, con la sala de espera llena de pacientes y sin médicos para atenderlos.

Además, los sanitarios recuerdan que realizan guardias de hasta 48 horas en distintos centros, por lo que están sobrecargados de trabajo. Indican que eso es malo para todos.