Costas prepara una transformación profunda de viales y taludes en Razo

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

ANA GARCÍA

Accesos y aparcamientos variarán, y se frenarán los desprendimientos

22 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La Demarcación de Costas de Galicia prepara una profunda transformación de Razo, en Carballo. El Ministerio para la Transición Ecológica publicó ayer el llamado Proyecto constructivo de protección ambiental del borde litoral en la playa de Razo, que incluirá tres actuaciones: el tratamiento y estabilización de los taludes, uno de los principales problemas de la playa, sobre todo en su zona oriental (hacia A Cabreira) desde hace años; el traslado del vial existente sobre el talud del borde, que en una buena parte ya está cerrado al tráfico, y la reordenación de accesos, tráficos y aparcamientos.

El documento de Costas, de casi 180 páginas, analiza la situación actual de Razo desde numerosos puntos de vista, y determina qué es lo que se va a hacer y el impacto que va a tener. Entre tres opciones de intervención analizadas (de menor a mayor grado de intervención en el paisaje), los técnicos se inclinan por una de ellas. No se aportan aún plazos ni presupuestos, pero se trata de medidas que se aplicarán a corto o medio plazo. El documento ya puede consultarse en el área de proyectos especiales, sometidos a evaluación ambiental, del ministerio.

Algunas de las actuaciones que se van a llevar a cabo coinciden con las ya previstas en el plan especial de Razo que está en fase de elaboración por parte del Concello (aún le queda bastante hasta que se termine), como los cambios de aparcamientos. Pero Costas tiene la competencia y la capacidad para actuaciones de este calibre. El ente público también quiere «preservar o, en su caso, mejorar la calidad del entorno ecológico de la zona».

Seis años y medio con la vía cortada

La Demarcación de Costas ya ha actuado más veces en la playa de Razo. La última, en el 2014, reforzando los taludes en la parte occidental, sobre todo. Pero las obras que vienen supondrán una transformación sustancial de todo el frente del arenal. La vieja carretera del litoral, y que tenía bastante tráfico puesto que conecta con Santa Mariña y con el municipio de Malpica, ya es historia. En uno de sus tramos, lo que era un vial por donde pasan dos coches ahora es menos que un carreiro. Todo ha ido cayendo hacia la playa. Está vedada al tráfico desde enero del 2013, tras los daños del temporal Gong. El PSOE puso especial empeño en tomar medidas al respecto (incluso encargó un informe geológico específico), ya desde el 2016, y el exdiputado Ricardo García Mira también se interesó por este tema, llevándolo como enmienda a los últimos Presupuestos. Costas es el único organismo competente en esta zona.

Las actuaciones programadas, por zonas

Tramo 1. Es de 103 metros, en la parte inicial de la entrada a la playa de Razo. Hace años ya se habían colocado tablaestacas secantes de madera. Para esta zona Costas propone un sistema combinado de estabilización, mediante, por ejemplo, escolleras. El actual paseo de madera se desplazará más hacia adentro, hacia el eje de la calzada, situando la senda donde actualmente hay una línea de aparcamiento, y anulando por tanto estos estacionamiento, algo pensado de cara al futuro, si los desprendimientos se siguen produciendo.

Tramo 2. Más hacia la zona occidental, mide 225 metros. Como en el caso anterior, hay muchas viviendas, pero más cerca de la playa. Las medidas que se aplicaron fueron más fuertes. Aquí, Costas propone realizar un retranqueo de la carretera perimetral a la playa, además de rehacer el muro de la escollera y, de nuevo, eliminar la zona de aparcamiento.

Tramo 3. Mide 272 metros. Pocas viviendas y ya se habían construido muros de escollera. Para esta zona, Costas propone colocar más tablaestacas y rellenar la escollera de vertidas, con un posterior vertido de arena sobre esta mismo punto, para que se puedan desarrollar las llamadas «plantas tapizantes». También habrá que rehacer los muros de escollera ya existentes. También los ingenieros quieren «anular la zona de aparcamiento, alejando así las infraestructuras de la línea de playa», y también limitar el acceso de vehículos rodados por el vial, «restringiendo el acceso solo a los coches de los residentes, por lo que el vial se transformará en una zona mixta, con preferencia peatonal, lo que supone una mejora sensible del entorno, minimizando la afección que el tráfico rodado causa a la playa».

Tramo 4. El último, un zona aún virgen, de 245 metros. Es donde cayeron más taludes y se cortó la vía, que ahora habrá que desviar. Esto ya lo intentó el Concello hace años, pero no hubo manera de llegar a un acuerdo con los propietarios de los terrenos. Quedaba la opción de expropiar, que seguramente hará Costas.