El ritmo de ventas del polígono de Bértoa es imparable

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

BASILIO BELLO

Xestur adjudicó tres nuevas parcelas, y el Concello dio dos nuevas licencias de obra

04 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El ritmo de ventas y construcción en el polígono industrial de Bértoa, en Carballo, es imparable. Más el 80 % está vendido, aunque mucho menos construido, porque los titulares de las parcelas tienen tres años para obrar desde que las adquieren. En algunos casos, ese período ya ha pasado (el primero se cumplió a finales del año pasado) y se han ejecutado las naves, pero en la mayoría aún queda mucho plazo.

Las ventas nunca faltan. Hace menos de un mes, Xestur realizó nuevas adjudicaciones, y de nuevo Carballo está en la lista. Cuando el parque de Carballo no es el primero de Galicia por metros cuadrados, lo es por parcelas, o al revés. Esta última vez no fue una excepción: solo Bértoa y A Sionlla, en Santiago, lograron vender tres parcelas cada uno, aunque el parque compostelano lo superó en metros cuadrados. Del polígono carballés pasaron a manos privadas 7.317 metros cuadrados, con una bonificación de 271.746 euros. Por tanto, el precio absoluto de mercado de las tres parcelas era justamente el doble, más de 540.000 euros.

Tras Carballo y Santiago, Xestur logró vender dos parcelas en los de Negreira y otras dos en Pereiro de Aguiar (Ourense). En San Cibrao das Viñas, Mos, As Gándaras de Lugo y Viveiro, una parcela en cada uno. En total, 14 en toda Galicia, por casi 70.000 metros cuadrados, y una bonificación de 2,7 millones de euros (5,3 millones a precio de mercado sin descuentos, que no son del 40 % en todos los polígonos).

Licencias

Además, la Xunta de Goberno Local de Carballo dio ayer licencia de obra para la construcción de una nave industrial para la fabricación de carpintería metálica en la calle Titanio del polígono, y otra para la construcción de una sin actividad específica de momento en la calle Wolframio. Este tipo de permisos, cuando no de actividad o de apertura, son habituales en las Xuntas de Goberno carballesas, lo mismo que los plenos en los que se aprueban las bonificaciones del 95 % del ICIO, entre otros tributos.

Menos de 30 parcelas, a partir de 32 euros el metro cuadrado

En el polígono de Bértoa quedan apenas 26 parcelas libres, según el documento que se puede consultar o descargar en la web de Xestur. Muy posiblemente sean ya menos, dado el ritmo de las transacciones. En todo caso, y según esos datos, hay parcelas desde 32,99 euros. Claro que, como es habitual, esos precios son para las más grandes y sin uso industrial, sino terciario. En concreto, es lo que se pide por un solar de 9.384 metros cuadrados, que saldría por 619.000 euros a precio normal, pero con los descuentos de la mitad se queda en 309.000 euros. Bonificaciones a las que se suman prácticamente todas las municipales, tanto en impuestos como en tasas. También está en 32,99 el metro otra finca (la más grande que queda disponible) de 13.214 metros. En vez de 871.000 euros, el que la compre abonará 435.000.

Desde ese precio hacia arriba hay varias opciones, pero nunca más de 45,97 euros el metro. Es lo que vale la más pequeña de todas, con 992 metros, para uso industrial o terciario, que sale por 45.000 euros. Pero la gran mayoría están entre 35 y 40 euros el metro, más o menos desde 1.600 metros para suelo industrial, y desde 1.900 para uso mixto de industrial y terciario. Las grandes áreas para proyectos de enorme dimensiones son historia.

Diez millones de euros en descuentos

Hace ya cuatro años y medio, en enero del 2015, Xestur ponía en marcha los descuentos del 50 % para las parcelas de Bértoa. Una medida necesaria, habida cuenta del escaso ritmo de ventas hasta entonces, y que ha tenido un éxito incontestable, lo que ha provocado que los otros parques de la zona, dependientes de SEA (Gobierno central) se hayan quedado atrás por no alcanzar estos descuentos. Con suerte, un 30 %. Las facilidades no son solo para la venta. También existe el derecho de superficie, modalidad que permite a las empresas acceder a las nueva parcelas mediante el pago de un canon anual muy reducido por metro cuadrado. Las bonificaciones han supuesto algo más de 10 millones de euros de menos para las arcas públicas.