Carballo debe comprar o expropiar fincas para ampliar el cementerio

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

BASILIO BELLO

Los Orzamentos reservarán más de 200.000 euros para unas obras que demandan más de un centenar de familias. Las últimas se realizaron hace quince años

25 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El cementerio de Carballo lleva quince años sin obras de ampliación, pero en este tiempo los vecinos han aumentado y, por consiguiente, también los decesos y los entierros. El Concello lleva mucho tiempo (más de un año y medio) preparando ese aumento de espacio, que será el tercero tras los trabajos de 1996 y los del 2003, o el cuarto si se incluye la construcción, que puso fin al de Cernide por los años 50, y del que queda la calle Cemiterio Vello y mucha maleza que se limpia a veces sobre los lugares en los que había tumbas.

Pero no es fácil. «Non damos chegado a un acordo coa propiedade», que es más de una, según señalaba ayer el edil Luis Lamas. Con una parte sí la hay, pero a veces las dificultades vienen de cuando hay varias personas titulares y, por diversas razones, resulta complejo llegar a un entendimiento pleno, o hay dificultades de localización. Por ello, el gobierno local va a reservar una partida de algo más de 200.000 euros en los Orzamentos del 2019. Si finalmente hay acuerdo total, esas parcelas se ampliarán, y si no, se irá directamente a la expropiación, con todo lo que eso implica de demora de plazos, pero es la única manera de avanzar. Hay casi 6.000 sepulturas, pero la lista de espera supera de largo las cien solicitudes, y seguramente aparecerán muchas más.

No obstante, el hecho de que no haya panteones a la venta no significa que alguien que carezca de sepultura vaya a quedarse sin nicho para un entierro. De hecho, «ninguén se quedou sen poder ser enterrado», indica Lamas. En su momento se reservaron una serie de sepulturas para esos casos urgentes, que se ponen a la venta por algo más de 600 euros. Son nichos sueltos, no panteones.

En todo caso, la ampliación no va a ser algo rápido. Casi ninguna lo es, por las numerosas cuestiones burocráticas con las que hay que lidiar. En Carballo, las últimas que se han llevado a cabo son las de las parroquias de Ardaña, Razo y Berdillo.

Al margen de los nichos, sigue adelante la construcción de un cruceiro, a cargo del escultor Anxo Cousillas. Estará en la entrada del cementerio, y sustituirá al que derribó un temporal en febrero del 2007, de escaso valor artístico. Si todo sigue adelante, tal vez a los dos años se pueda inaugurar.

Otras actuaciones en marcha

Algunas compras, sobre todo las que se van pactando con asociaciones de vecinos, salen adelante generalmente sin problemas, pero otras cuesta más. También se preveía la expropiación para construir un tramo de la vía de Razo, en la zona derribada por los taludes, y sigue a la espera. La falta de acuerdo o de papeles impidió comprar el castro de Ouxes, o más parcelas en O Bosque, pero sí se podrá hacer para ampliar la calle González López, que en A Milagrosa entronca con la avenida de Compostela y es usada a diario por cientos de vehículos.

Veinte años del proyecto inacabado de Fisterra

El cementerio de Fisterra cumple veinte años. Fue en diciembre del 98 cuando comenzaron las obras de desmonte en la ladera de Cabanas, que meses más tarde darían con los 168 nichos repartidos en 14 cubos de hormigón construidos de la que iba a ser la primera fase, pero de momento es la definitiva. Y hasta hoy. Ha crecido la literatura, la fama y los premios, pero lo demás sigue igual. Pero el alcalde, José Marcote, quiere terminar la obra. «Será para o vindeiro mandato», explica. Y eso tanto si sigue en el gobierno como, en caso de que haya cambios, lo propone otro grupo, porque le dará su apoyo. «Sempre quixemos acabalo, pero houbo outras prioridades que atender», añade. Acabarlo implica algo tan básico como ponerle agua y luz, además de lograr todos los permisos sanitarios. Pero puede que haya un cambio de rumbo. Es cuestión de hablarlo, dice el regidor, pero incluso puede buscarse una salida como receptorio de cenizas, habida cuenta de que son muchos quienes acuden al cabo a esparcirlas, y también ha habido interés en el propio cementerio.