El lunes se aprobará la ordenanza que limita a 30 la velocidad en el casco urbano carballés

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

BASILIO BELLO

El texto ha estado a exposición pública y no ha recibido ninguna alegación ni ha habido aportaciones

25 nov 2018 . Actualizado a las 11:59 h.

La nueva ordenanza municipal que regula el tráfico, la movilidad y la seguridad viaria se aprobará en el pleno de Carballo del próximo lunes. Y que fija, entre otras cuestiones, que la velocidad máxima quedará limitada a 30 kilómetros por hora en el casco urbano, con carácter general. Habrá que señalizar claramente desde dónde empieza a regir esa limitación, en los diferentes accesos a la localidad, y en todo caso en las calles de plataforma única, que cada vez son más, se mantiene el máximo de 20. Además, el gobierno local podrá reducir los límites de cualquier vía municipal siguiendo un proceso fundamentado, con garantías y audiencias a los afectados.

La ordenanza fue presentada ayer por el alcalde, junto a la concejala Maica Ures, al dar cuenta de los asuntos plenarios. Aunque ya era conocida en parte, desde que La Voz anunció sus características generales en septiembre, y también gracias a la exposición pública de las últimas semanas, en la que -por cierto- no ha habido ninguna alegación o aportación. Frente al borrador inicial se han añadido pocos cambios, fruto de las aportaciones técnicas. En la comisión previa la oposición se abstuvo, y con independencia de lo que hagan el lunes, la mayoría del BNG es suficiente para su aprobación.

La ordenanza también fija claramente los usos de los vehículos de movilidad personal, que cada vez son más frecuentes en los espacios públicos, especialmente en las aceras. Los peatones tendrán la preferencia de uso, pero también a ellos se les imponen obligaciones en cuanto a cruzar vías o al usar los pasos de peatones.

Algunas características de la nueva normativa:

Velocidades. Siempre en vías municipales, las carreteras que tengan aceras o arcenes para peatones y ciclistas tendrán marcada la velocidad máxima de 60 kilómetros por hora. Pero si no hay esos espacios laterales, será de 40. En las travesías de los núcleos de población, con aceras y arcenes se podrá circular a 40 como máximo. Sin ellas, también habrá que ir más lento: no se podrá pasar de 30. Esta es la velocidad que se fija para todas las travesías urbanas, y para las de plataforma única queda como está en la actualidad, en 20 por hora como máximo. En las zonas peatonales, en caso de que el paso de coches esté autorizado, o si hay mucha afluencia, los conductores deberán acompasar su velocidad a la de los peatones.

Bolardos. Deberán ser móviles o retráctiles, siempre para la entrada a vías peatonales o con acceso restringido, y con un diseño o características requeridas por la normativa técnica de accesibilidad a espacios públicos urbanizados.

Zona azul. Se incluye en la normativa, y permitirá que si hay más cambios en las plazas (no parece probable, más bien habrá menos con las nuevas obras del centro) baste con aprobarlos en pleno, sin tocar la norma. Seguirá igual: 90 minutos máximo de 9.00 a 20.00 horas, excepto domingos, festivos y las tardes de los sábados, que no hay limitaciones.

Multas. Las infracciones leves se sancionarán con 80 euros; las graves, 200 euros, y las muy graves, 500 euros. El descuento del 50 % se mantiene si se paga en los 20 días naturales tras la comisión de la infracción.

Tipos de infracciones. La lista es muy larga. Es muy grave, por ejemplo, derramar líquidos en la calle por vehículos a motor o carga, de manera negligente o voluntaria, y sin señalizar, es muy grave, al igual que circular con vehículos o transportes especiales sin autorización.