«Prendéronme lume e escaparon mentres trataba de zafarme»

M. López / F. Rodríguez CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

MARCOS MIGUEZ

Álex Muíño se quemó la espalda y el torso durante una noche de fiesta. Los médicos le dicen que un mechero que explotó en su bolsillo pudo causar el fuego, pero él lo descarta

03 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Álex Muíño, de 26 años, se quemó buena parte de la espalda y el torso durante una madrugada de fiesta, el pasado viernes, por Carballo, y todavía no sabe muy bien cómo. Pasaba de las cinco y media de la madrugada y este joven carballés miraba su reloj para dilucidar si sería o no hora de recoger, ya que al día siguiente tenía que trabajar. «De repente notei lume, e enseguida se propagou por toda a camisa», explicó en Radio Voz el joven, que en la actualidad está ingresado en la unidad de quemados del Chuac.

Aunque desde los servicios médicos se le trasladó la posibilidad de que pudiese deberse a la explosión de un mechero que guardaba en el bolsillo, el joven discrepa y desecha por completo esa teoría. Cree que tuvo que ser un individuo, «ou individuos», el que le prendió fuego a su camisa, para después escaparse corriendo mientras él intentaba, como buenamente podía, desabrocharse los botones y deshacerse de la prenda en llamas. «A miña teoría é que, mentres eu intentaba zafarme, eles marcharon polos recunchos da zona», continúa Álex con su relato: «Ía eu só, e debeu ser por iso polo que aproveitaron a ocasión. Intúo que non foi nada persoal, senón algo completamente ao azar».

El suceso ocurrió en una céntrica calle del casco urbano de Carballo que une un conocido local de copas con la rúa donde se concentra la movida nocturna. Sin embargo, parece no haber testigos de lo ocurrido.

Aunque en un principio Álex decidió que no era necesario que le viesen las heridas, pasada una hora comenzó a sentir molestias, por lo que acudió al ambulatorio de Carballo, donde le informaron de que, dada la gravedad y profundidad de las quemaduras, buena parte de las terminaciones nerviosas de su espalda estaban completamente calcinadas: «Por iso nese momento non notaba a dor». Fue trasladado al Chuac, donde permanece ingresado en la unidad de quemados desde hace varios días, y donde le han sometido a varios injertos de piel. «Os médicos din que teño, como mínimo, para dúas semanas máis [hospitalizado]. E despois a recuperación na casa, que será bastante máis longa».

Para denunciar públicamente lo ocurrido, y para «que non lle suceda a ninguén máis, especialmente a xente máis vulnerable, como poden ser os nenos», ha grabado un vídeo que, tras subirlo a sus perfiles sociales, se ha hecho viral por la Costa da Morte.

Según apunta, envió a sus padres al puesto de la Guardia Civil en Carballo, pero los agentes les indicaron que sería mejor que él mismo se presente en persona, dijo Álex en Radio Voz. Dado que todavía le queda un tiempo en el hospital y no podrá desplazarse, invitó a una patrulla a pasarse por la habitación en la que permanece ingresado y que le me tomen declaración.