Carballo tendrá en breve la primera electrolinera municipal de la zona

s. g. rial / j. capeáns CARBALLO, SANTIAGO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

JESÚS PICALLO

Hay más, como en Fisterra, pero privadas. El uso en la provincia es todavía ínfimo

24 sep 2018 . Actualizado a las 07:59 h.

Carballo tendrá en breve, cuestión de semanas, una electrolinera de uso público. Estará en el parque del Rego da Balsa. «Levamos xa moito tempo xestionando iso», indicó el regidor, Evencio Ferrero. Y es que hay muchos aspectos técnicos que regular en este tema, que todavía se está desarrollando. Es aún de uso residual, pero en los próximos años estará a la orden del día en todos los núcleos urbanos, como ya ocurre en numerosas ciudades europeas desde hace tiempo. En el caso de Carballo, se da además cumplimiento al contrato con la concesionaria Ferroser-Ferrovial, firmado hace cinco años, que incluía entre otros compromisos la instalación de un punto de recarga eléctrico, y ahora por fin lo llevará a cabo.

En todo caso, hay algún otro, pero de titularidad privada. Lo tiene el hotel O Semáforo de Fisterra y el bar anexo O Refuxio, por ejemplo, al lado de este. Hay conexión para vehículos Tesla y para los genéricos. De hecho, es un servicio para los clientes, pero si un usuario ajeno lo necesita se le aplica la tarifa de una plaza de aparcamiento, porque no se puede imponer la tarifa imputada directamente a la energía. El responsable, Jesús Picallo, señala que hace medio año que está disponible y, de vez en cuando, los visitantes lo utilizan.

En el caso de Carballo, en breve se conocerán la condiciones de pago y la velocidad de carga, los aspectos básicos que preocupan a los usuarios, aunque de momento los coches eléctricos son mínimos.

«Tengo diez gasolineras, varias en los alrededores de Santiago, en Santa Comba y en Oleiros. En seis he instalado puntos para coches eléctricos, gratis durante mucho tiempo. Te mentiría si te digo que hemos servido más de veinte cargas en el último año». Es la palabra del empresario Esteban Parra, un quijote de las estaciones de servicio que siempre ha apostado por cualquier innovación o alternativa energética para el mundo de la automoción, pese a que los números estén a años luz de ser rentables. A día de hoy, el uso es «menos que residual», según sus palabras, mientras que otros propietarios utilizan términos similares para hablar de una utilización tirando a nula. Los hay que hasta no saben si funciona y tienen la base como elemento decorativo.

El mantenimiento y diversidad de algunos de los puntos públicos es más que deficiente, y es especialmente preocupante en el área de A Coruña, donde existen pocas estaciones si se compara en términos relativos con Santiago, donde proliferan por la apuesta de los establecimientos hoteleros que quieren ofrecer un servicio más a sus clientes.

La demonización del diésel, los impuestos al alza y las sucesivas crisis del petróleo obligan a poner el radar en busca de otras alternativas que «serán rentables cuando esté muerto, hoy por hoy no las veo», ironiza Parra. Las opciones son de momento muy limitadas, y detrás de cada una hay intereses industriales milmillonarios: el gas licuado, el gas natural comprimido o el hidrógeno serán las apuestas de grandes corporaciones que tendrán que batir primero a los gigantes del petróleo. «Mientras no se garanticen los seiscientos kilómetros de autonomía será difícil que se extienda el coche eléctrico», comenta un empresario de la automoción.

Conexión en casa

Los vendedores de eléctricos al 100 % o híbridos enchufables son conscientes de que todos sus clientes tienen la posibilidad de conectar el coche en sus casas -normalmente unifamiliares- o en los centros de trabajo, y el interés por las electrolineras públicas es solo para emergencias. De hecho, está en cuestión que las ventas estén ligadas a la proliferación de puntos, aunque ayudarían. En Galicia hay 155 puntos (casi un tercio en la provincia de A Coruña) pero la automoción enchufable sigue moviéndose en cifras muy discretas.

El punto de carga eléctrica en la capital de Bergantiños estará en el Rego da Balsa