Un incendio iniciado en la freidora de A Cova destroza el garaje de la iglesia

Cristina Viu Gomila
Cristina viu CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Yoli Moreira

El fuego se propagó por la salida de humos, que pasa por el sótano del complejo parroquial hasta el tejado

09 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El incendio comenzó en la freidora del bar A Cova, que forma parte del complejo parroquial. Había tres mujeres trabajando, además de un distribuidor de bebidas. Los cuatro intentaron apagar las llamas con un extintor pero «parecía que ían a máis», explicó una de las cocineras. Cogieron otro, pero no lograron que funcionara por lo que acabaron saliendo a la calle.

Para entonces, salía por los respiraderos una humareda densa y negra del garaje adyacente. Además, era posible ver destellos a través de las rendijas que indicaban que en el interior había llamas. Quizá impelido por el extractor, el fuego se trasladó por la tubería de salida de humos, que reventó en el garaje. Debió ser una de las explosiones que escucharon los que estaban en la zona cuando los bomberos aún no habían llegado. Los bomberos sacaron varias bombonas y utilizaron en todo momento el material de respiración autónoma, pero el principal problema es que la visibilidad, sobre todo en el garaje, era nula. En el interior había siete vehículos.

Curiosamente, el local en el que comenzó el incendio está en mejores condiciones, salvo la cocina. De hecho se aprecian pocos daños, porque las llamas salieron por la parte trasera hasta alcanzar la zona en la que se guardan los coches de la iglesia y de vecinos que tienen plazas alquiladas. Uno de ellos provocó la movilización de los bomberos. Su esposa aseguraba estaba en el garaje, pero el hombre había ido a pie a hacer recados antes de ponerse a conducir. Además, una mujer sufrió un ataque de asma y tuvo que ser trasladada al centro médico, informa el 112.

La calle permaneció cortada hasta primeras horas de la tarde y todavía es necesario hacer una evaluación de los daños, que son muy importantes. Mientras estuvieron los bomberos hubo mucho público en la zona. Mezcladas entre la gente, las tres cocineras, muy afectadas por lo ocurrido, así como la gerente del establecimiento y su familia, al igual que los comerciantes de la calle, que tuvieron que cerrar.