Cantante gallego-andaluza criada Badalona, tiene su segundo tema propio en el mercado. Lorena Rosales visita estos días su tierra materna, Carballo
12 feb 2021 . Actualizado a las 20:38 h.Lorena Rosales (1990) tiene medio territorio español en su sangre y en su vida. Su madre es de Rus, en Carballo; su padre, de Córdoba. Se crio en Badalona, donde vivió hasta los 21 años, edad a la que se marchó a Londres. Desde hace un tiempo reside en Madrid. Es cantante, de vocación y formación ya desde niña, aunque no de dedicación completa, ya que alterna con otros trabajos a la espera de su gran oportunidad. Por falta de tesón no es. En el 2011 estuvo a punto de representar a España en Eurovisión, pero en la selección final se impuso otra gallega, Lucía Pérez. Hace poco participó en el programa Fantastic dúo, donde intervino junto a Carlos Baute. En TVE había tenido otra participación en el 2007. Se ha presentado a diversos cástings televisivos, pero no tuvo mucha suerte, como ella misma reconoce. Y es que fue precisamente un programa célebre, Operación Triunfo, en su primera edición, su gran espoleta para dar el salto a un arte que llevaba dentro. «Yo, de pequeña, siempre me recuerdo cantando. Me viene de atrás. Mi padre ya cantaba en la tuna universitaria de Córdoba, pero lo dejó cuando se tuvo que ir a Cataluña a trabajar. En la familia de mi madre había quien tocaba la gaita. Así que algo había. Y justo con OT, cuando yo tenía 11 años, le dije a mi madre que quería cantar. Y me llevó a la Escuela de Música de Badalona, aprender solfeo, canto y guitarra. Hasta los 18 años. Después en la carrera escogí comedia musical», explica. Logró una beca para irse a Inglaterra. También compone. Pero en este caso aún le queda mucho camino por recorrer. «Mejor la voz que la composición [ríe]. Me cuesta más, pero es cuestión de practicar», señala. En ello está. Su primer sencillo, No soy yo, es de su autoría, y el que acaba de salir al mercado, Masoquista, también. Ambos se pueden escuchar en sus redes sociales, en Youtube...
Sus temas
¿Y de qué trata Masoquista? «Mucha gente la relaciona con ese tipo de prácticas, pero en este caso hablo de los amores que no convienen, que sabes que no vale, pero siguen pensado en él, advirtiendo de que no seas masoquista. Y desde un punto de vista feminista. Igual que el anterior: música urbana, moderna, desde el puto de vista de un mujer». El reguetón y similares los consume, como la música latina, consciente de que es una tendencia de moda musical muy seguida, pero a su estilo. Y sigue componiendo, con varios temas en miras, pero sobre todo con la idea de poder publicar un disco. No es fácil. «La música es complicada. Y sobre todo si no tienes buenos contactos. Yo vine en diciembre de Londres y ahora estoy en Madrid. Si no tienes una buena productora que te eche una mano... De hecho, ya estoy pensando en regresar a Londres, pero ya veremos. Hay mucha competencia, las oportunidades escasean. Editar un tema cuesta dinero, la promoción, el vídeo... Siempre he trabajado precisamente para ir haciendo cosas en el mundo de la música. Pero ahí sigo, la ilusión la mantengo y las oportunidades pueden llegar», resume. Además de sus apariciones televisivas y las de las redes, recientemente participó en las actuaciones del orgullo gay de Madrid, un buen escaparate para llegar a miles de personas.
Le gustaría trabajar en Galicia. No habla gallego, pero lo entiende perfectamente. Muchas vacaciones, muchos años, fueron en Carballo. Hacía ya cuatro años que no venía a Bergantiños, por cierto. Ahora intentará acercarse en más ocasiones.
Lorena le bien da a las baladas y a los boleros, pero se adapta a todo tipo de ritmos y estilos. Y no tiene problemas de movilidad. «Ya he vivido en muchos sitios», indica. «Y me gustaría cantar algo en gallego», añade.