La demanda de pisos de alquiler en Carballo alcanza niveles históricos

Cristina Viu Gomila
Cristina Viu CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Laura Rodriguez

El arrendamiento de locales comerciales, por contra, vive sus horas más bajas

12 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Una simple ojeada a las páginas web y los escaparates de las inmobiliarias de Carballo es suficiente para darse cuenta del insólito panorama al que se tienen que enfrentar los profesionales del sector.

La oferta de pisos en alquiler disponibles es casi ridícula, algo que no es nuevo. Lo diferente es que la oferta ha crecido mucho, pero no es capaz de cubrir las necesidades de la población. «Ahora hay que olvidarse de pasar la tarde enseñando pisos, si encuentras uno o dos para mostrar a los clientes ya es mucho», dice Chus Arán.

Lo cierto es que en su cartera apenas hay unas pocas viviendas, la inmensa mayoría sin ascensos y a partir de 240 euros mensuales. Son pisos antiguos a los que se ha dado un lavado de cara.

Para Miguel González, de Blancocasa, la situación es la misma. Entre las múltiples propiedades que gestiona los pisos de alquiler se cuentan con los dedos de una mano.

La cuestión es que las viviendas que se ponen en el mercado del alquiler, vuelan. En las inmobiliarias reciben muchas llamadas que tienen que rechazar porque el primero que llega a la vivienda, se la queda.

Los alquileres en Carballo andan entre los 300 y los 500 euros, dependiendo del estado del piso y de su ubicación. Ninguno de los agentes inmobiliarios consultados recuerda una demanda tan alta de casas para arrendar, sobre todo porque hace 20 años los tipos de interés bajaron mucho y subieron las promociones, por lo que la compra de una vivienda se convirtió el objetivo final para muchas parejas.

Ahora, tras la crisis y el pinchazo de la burbuja inmobiliaria, la tendencia se ha invertido. Los bancos son mucho más reacios a la concesión de crédito y el mercado laboral es inestable, por lo que comprar una casa se hace inviable para parejas jóvenes, por lo que la opción del alquiler es la más habitual.

Miguel González señaló que se han puesto en el mercado viviendas que fueron adquiridas hace ya años como inversión y que ahora se ponen en alquiler. Además, el cambio de legislación protege más a los propietarios, por lo que la oferta se ha multiplicado.

El caso es que pisos casi no hay para alquilar. La oferta es muy pequeña, pero todo lo contrario ocurre con los locales comerciales. «Se alquilan entre 5 y 6 pisos a la semana, en cuanto salen, pero en lo que llevamos de año apenas se han arrendado un par de establecimientos», dice Chus Arán.

Ahí la oferta sí que es amplia y variada y aumentará con la apertura del centro comercial. Hay locales que llevan años en oferta, pero han aparecido nuevos. Curiosamente, fue la crisis económica la que disparó la demanda. Muchas personas que perdieron su puesto de trabajo decidieron montar un negocio y establecerse por su cuenta. Hubo un gran movimiento de aperturas y cierres lleva ya una buena temporada detenido.

Otro nicho de mercado para el que no hay oferta es el de casas pequeñas con jardín. Cada vez son más frecuentes las mascotas y en los pisos de alquiler no están bien vistas, por lo que hay una cada vez mayor demanda de viviendas para atender a esta clientela creciente.