El descuido, las mareas y el vandalismo afectan un año más a uno de los parajes más visitados de la zona
24 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Por lo general, el Concello de Carballo realiza una puesta a punto de la playa de Razo (y de As Saíñas y A Pedra do Sal) antes del comienzo del verano, de cara a la nueva temporada de playas. Pero como el arenal tiene cada vez más visitantes incluso fuera de los meses tradicionales, especialmente en fines de semana o festivos, y siempre en días de sol, tampoco le vendría de más que se llevasen a cabo con más regularidad. Los efectos de las mareas invernales, especialmente los desplazamientos de arena, ya se notan en piezas de madera, como pasarelas o escaleras, movidas o rotas. El río, por cierto, ha variado su curso, como es habitual, pero no de manera tan pronunciada como el año pasado, ni con la misma montaña de arena a su alrededor.
El vandalismo también se aprecia en algunas pintadas, especialmente en la zona de juegos, que pide una rápida reposición de un columpio. O en la rotura de los postes de los códigos informativos QR, que ya llevan así bastante. Los paneles clásicos también sufren el paso del tiempo. Se echan de menos algunos tan bien hechos como los de As Saíñas o el mirador de Sambade, por ejemplo. Las papeleras, en general en todo el litoral, se reponen con celeridad, aunque alguna necesita un repaso. La arena también empieza a apoderarse de zonas del aparcamiento, aunque eso hasta el verano no supone ningún problema, pues hay espacio suficiente.
Los taludes siguen a lo suyo, desprendiéndose, así que quienes paseen hacia la playa, por el arenal o por la pista, deben extremar las precauciones. Hay cintas indicadoras, pero lo que mejor indica el peligro es el sentido común.