La obligatoriedad de los microchips no frena los abandonos de animales

«Desde que saiu a nova das sancións, hai unha demanda moi grande de microchips. Hai moita desinformación sobre o tema, a xente párate na rúa constantemente para preguntar», comentaba ayer Juan Quintáns, de la clínica veterinaria Criaturas de Vimianzo. Hace justo un mes que saltaba la noticia: la Xunta amplía la Ley de protección y bienestar de los animales de compañía en Galicia, y endurece las sanciones para aquellos propietarios de perros que no tienen el correspondiente microchip, esto es, el DNI de los canes y principal herramienta que permite encontrarlos si se pierden. Esta práctica pasa a considerarse una falta grave, y las multa que conlleva va desde los 501 a los 5.000 euros.

El temor entre los ciudadanos a ser sancionados se nota ya en las clínicas veterinarias, donde este mes han colocado más identificadores de lo que viene siendo habitual, a pesar de que antes ya eran obligatorios y no precisamente caros (entre 30 y 35 euros). «Se facemos unha comparación de datos con xaneiro do ano pasdo, a implantación de chips subiu a pasos axigantados», dice Silvia Mora, de la clínica Gran Vía de Carballo.

Desde Argos de Cee se manifiestan en el mismo sentido, y califican de eficientes la nuevas medidas. «Se trata de una ley moderna y positiva. Esperemos que ayude a legalizar muchos más perros y a reducir el abandono», explica el veterinario Pablo Valle. No obstante, desde las clínicas no descartan que el temor a las multas disminuya. «Hace unas semanas hubo muchísima demanda, ahora la cosa se ha calmado y digamos que empieza a decaer», indica Vanesa Rodríguez, de la clínica carballesa Arnela.

Crecen los abandonos

A pesar de la obligatoriedad en la implantación de microchips, el número de abandonos no disminuye. De hecho, los desamparos a perros en la perrera de Carballo han aumentado en lo que va de año. Unos datos que ofrece Rosa Guerra López, la responsable de los servicios de lacería de Servigal, la empresa que se encarga de la Canceira carballesa, donde el 80% de los canes siguen sin tener identificación obligatoria. «O auxe da implantación de chips nas clínicas non nos afecta, porque eses animais non van ser abandonados», señala la experta, quién sostiene que el abandono seguirá a la alza: «Se alguén ten un can sen microchip porque non quere deixar constancia de que o ten e o multan, o que fará é deixar o can na rúa sen máis. Os cidadáns teñen que ser conscientes de que é unha obriga legal».

Rosa cree que esto será controlable con el tiempo, e invita a una colaboración entre los agentes implicados. «Isto é unha cuestión de todos: dos cidadáns, das administracións, da Policia Local e das clínicas», insiste.

«Temos que ser responsables e poñerlle o chips aos cans»

Alberto Periscal (Carballo, 1987) é preparador de cans en ApeCan Adiestramiento Canino de Carballo desde 2016.

-¿Todos os teus cans teñen microchips?

-Si, ao último que llo puxen foi a un pastor belga cando tiña tres meses

-¿É necesario?

-Sempre considerei que os cans teñen que telo. Se se perden ou escapan identifícaos calquera. Agora a lei esixe entregalos con chip tanto na compra como na adopción. Como propietario, considero que está ben que o poña o vendedor, pero creo que tamén debemos ser responsables.

-E como profesional, ¿aconséllalo?

-Si, sempre o aconsello. A maioría dos meus clientes xa llo teñen.

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