José Manuel Casal
El rifirrafe entre Arán y Eirís al acabar el pleno se zanjó ayer en Radio Voz con disculpas aceptadas
22 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.
Dio más que hablar el rifirrafe que ocurrió tras el pleno de Carballo, el lunes por la noche, que la propia sesión. La discusión entre Xosé María Arán, que había acudido junto a los representantes del Casino, con Andrés Eirís, de Terra Galega, en la que el primero reprochaba al segundo que su grupo se abstuviese en la votación de la declaración institucional a favor (como deseo) de la pervivencia de la institución y de la continuidad del edificio que ocupan desde 1925.
Fue una discusión acalorada, seguida con cierto estupor por el resto de concejales (y con casi 6.000 reproducciones del vídeo en el Facebook de La Voz de Carballo a media tarde de ayer, seguramente hoy ya muchas más), que ya se estaban marchando, y que venía precedida por comentarios anteriores durante la sesión. Ayer, esos ecos se trasladaron a Radio Voz Bergantiños, en una tertulia con los representantes de los cuatro grupos en la que, ya en el tramo final, intervino también Arán. Estefanía Canosa, de TeGa, insistió en que la declaración de apoyo son «fermosas palabras» que de poco servirán porque el Casino ocupa una propiedad privada. La edila se quejó de los «insultos de algún asistente», frente a los que TeGa demostró «o seu talante democrático, permitindo que seguise alí, podendo ter avisado ao alcalde. Non ofende quen quere, senón quen pode. Non o tomamos -añadió- como insultos. En TeGa nin sequera recibimos ordes do partido para ter que recibilas dunha asociación».
Xosé María Arán llamó por teléfono minutos más tarde e intervino en directo. Explicó que todos asistían a un pleno que se presumía «feliz» porque no habría problemas en aprobar la declaración institucional. Y que le llamó la atención el resultado. «Quebráronseme os ánimos», dijo, recordando que lleva muchos años implicado en el tejido asociativo carballés y que, en todo caso, fue una discusión particular con Eirís, a quien conoce desde niño. Añadió: «Se houbo algún improperio, non me doen prendas en pedir as máis sinceras desculpas, o cortés non quita o valente».