La falta de un local adecuado condiciona el futuro de Afaber

Patricia Blanco
Patricia Blanco CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Jose Manuel Casal

El presidente, Jesús Villar, reclamó del regidor carballés apoyo para seguir creciendo

16 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde el 2001, fecha de constitución, la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzhéimer de Bergantiños viene desarrollando una ingente actividad en tres sentidos: trabajo con el paciente, con el familiar o cuidador -no menos importante- y con la propia sociedad, preparándola para uno de los problemas sociosanitarios más importantes. Ahora, tal y como detalla su presidente, Jesús Villar, se enfrentan a un punto de inflexión: necesitan un nuevo local, un espacio adaptado a la demanda existente y acorde asimismo a la expansión de actividades a otros municipios -como Cabana, A Laracha, Santa Comba o Vimianzo- que están llevando a cabo: «Despois de 15 anos, é hora de dar un paso adiante». Esa carencia condiciona el crecimiento de la entidad y, por tanto, su futuro. Así se lo planteó ayer el propio Villar al regidor carballés, Evencio Ferrero, durante la entrega del certificado que acredita a este Concello como solidario con el alzhéimer, por su labor.

«Se queremos medrar, e nós temos ansia de facelo, non podemos seguir enfangados. Hoxe, onde estamos [un bajo en la rúa Camelias carballesa] non é un sitio idóneo. Temos que darlle un empuxe a isto e, para iso, necesitamos o apoio do alcalde, aínda que el despois nos diga de ir un sitio ou a outro. O espazo que temos agora [unos 160 metros cuadrados] quédasenos pequeno», reseña el presidente de Afaber. Por las tardes, unas 15 personas, en distintas fases del diagnóstico, acuden al local. Con ellos se trata de frenar el avance de la enfermedad y, para sus familiares, son unas horas de respiro. Ocurre que ya hay al menos cinco personas en lista de espera y, además, Villar considera que, en otro espacio, «coma o que ten Apem, por exemplo», se les podría ofrecer un mejor tiempo de calidad. El hecho de que estén velando por un servicio que ya deberían ofrecer las propias Administraciones, dice, es otro cantar.

Zonas específicas

Teniendo en cuenta esa demanda, y conscientes de que, de poder encarrilarse hacia un nuevo centro, el camino será «largo», incluso habría que plantearse «abrir tamén polas mañás». Pero ese horario, para un enfermo de este tipo, no es el mejor. Villar detalla que, si el espacio fuese el adaptado, se podrían hacer más diferenciaciones, con zonas específicas de terapia, según lo avanzado de la enfermedad en cada caso.

Posible creación de empleo

El responsable de Afaber recuerda que, aunque en el nombre de la entidad figura la comarca de Bergantiños, acabaron por ser «unha referencia na Costa da Morte»: «Non temos problema en ir a Cee ou Corcubión, Vimianzo ou Santa Comba, se nos chaman para dar unha charla, como ten pasado», dice. No obstante, tiene claro que el nacimiento de la entidad Afafes, en Soneira y Vimianzo, es una buena noticia: «Nós non podemos chegar a todo. Será estar en contacto, poder facer cousas conxuntamente, axudarnos». En Afaber hoy prestan servicios una psicóloga, una fisioterapeuta, una auxiliar de enfermería, una terapeuta ocupacional y una trabajadora social. De crecer, podrían ser quizás más empleos: «Unha empresa con 5 ou 6 traballadores xa non ten queixa», apunta Jesús, quien apela a unir esfuerzos para que puedan seguir creciendo y respondiendo a la finalidad última, la ayuda a los enfermos, más allá de los cursos o actividades que desarrollan. Van haciendo con las ayudas de La Caixa, Mapfre, Diputación..., pero el nuevo local se ha convertido en una prioridad para la directiva.

«Ten que ser unha actuación conxunta de Administracións con competencia en servizos sociais», afirma el regidor

Poco antes del acto de entrega del certificado de concello solidario con el alzhéimer a Carballo -materialización del acuerdo plenario adoptado el pasado 31 de octubre- , Suso Villar incidía en que la enfermedad, lejos de representar un problema que mengüe, va a más: «Antes viña xente de 80 anos, pero agora hai xente que, antes de xubilarse, ten xa síntomas». Hay que tener en cuenta, además, que se trata de una dolencia que trasciende a la propia persona afectada, extendiéndose asimismo a los familiares y cuidadores, que han de ofrecer una atención 24 horas al día. En este sentido es donde entra el papel que juegan las asociaciones como Afaber, por el respiro que ofrecen y, también, por las actividades preventivas y de retraso.

Efectivamente, Jesús Villar trasladó al regidor, Evencio Ferrero, y a la edila de Servizos Sociais, Maica Ures, la situación de la entidad, incidiendo en la cuestión de un nuevo local. Desde el Concello, según explicó ayer el alcalde, se le dijo a Afaber que se valoraría la situación, en cuanto es cierto que existen una serie de necesidades: «O que nos parece é que ten que ser unha actuación conxunta das Administracións que teñen competencias en servizos sociais. Estamos falando da Xunta e tamén da Deputación. Habendo outras Administracións dispostas, por suposto que dende o Concello tamén se valorarían esas necesidades». Al acto de entrega asistieron también María Vilariño y María Luz Súarez, vicepresidenta y tesorera de Afaber, respectivamente.