Los 1.272 kilos de hoja de tabaco de Cabana están guardados sin seguridad

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Jose Manuel Casal

Una instalación municipal alberga la furgoneta y la mercancía incautadas en el 2015

20 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los 1.272 kilos de hoja y picadura de tabaco decomisados por la Guardia Civil el 25 de octubre del 2015 a un grupo integrado por cinco personas se encuentran al alcance de cualquiera y susceptibles de ser robados. Así lo confirmaron ayer en el Concello de Cabana, que alberga desde hace más o menos un año la mercancía incautada a dos hombres y tres mujeres, con vínculos familiares.

Desde el Ayuntamiento confirmaron ayer que este alijo de hoja y picadura de tabaco está guardado en una instalación municipal. En concreto, «dentro dunha furgoneta no interior dun recinto propiedade do Concello. Do total do alixo. Outra parte segue gardada dentro da nave».

Una vez desmantelado el operativo, el 25 de octubre del 2015, la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Carballo ordenó el almacenamiento de este tabaco a la espera de que concluyeran las diligencias policiales y la instrucción del caso. Esta mercancía, presuntamente ilegal, fue guardada dentro de una furgoneta en el interior de una nave municipal en Cabana.

Las semanas transcurrieron y desde el Concello solicitaron a la Guardia Civil, «hai máis ou menos un ano», la retirada de este vehículo para poder aparcar dentro de la nave los coches municipales. La furgoneta pasó así de estar estacionada en el interior de la nave a hacerlo fuera, pero dentro siempre de la instalación municipal: «E así levamos cerca dun ano. Falamos varias veces cos responsables da Garda Civil, pero a furgoneta segue aí, co risco de que alguén veña, entre no recinto e a rouben co tabaco dentro».

En noviembre

La instructora del caso emitió un auto el pasado 26 de noviembre ordenando la destrucción inmediata de esta mercancía, incautada a dos hombres y tres mujeres, de entre 25 y 44 años, vecinos de A Laracha y Arteixo y a los que se instruyen diligencias penales por un presunto delito de contrabando. Sin embargo, casi dos meses después de esta resolución judicial, nadie se ha acercado hasta el Concello de Cabana para notificar y proceder a la retirada de esta mercancía.

Testigos presenciales aseguraron que estos 1.272 kilos de hoja y picadura de tabaco se encuentran en mal estado, como consecuencia de la humedad acumulada y del tiempo transcurrido desde su incautación, pero como apuntaron desde el Concello y de la Guardia Civil, «el riesgo de robo está ahí porque las medidas de seguridad son casi nulas. Cualquiera puede venir, coger la furgoneta con la hoja de tabaco en su interior y llevársela».

En la V Compañía de la Guardia Civil de Carballo llevan dos meses esperando a que les manden medios desde la Comandancia para retirar este alijo. En estos casos el instituto armado sigue un procedimiento exhaustivo de retirada y destrucción. Hay que acreditar ante el instructor o instructora del caso que la incineración se ha efectuado de acuerdo a la ley. Para ello hace falta que la Comandancia facilite los medios técnicos, algo que desde el 26 de noviembre del 2016 no ha sucedido.

Por lo general este tipo de productos son incinerados en la central térmica de Meirama, labores que se efectúan con el control y supervisión de técnicos de Logista Altadis, empresa resultante de la fusión, en octubre de 1999, de las compañías Tabacalera Española y la francesa Seita.