La comarca vive la Navidad con más accidentes de los últimos cinco años

Patricia Blanco
Patricia Blanco CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

Las carreteras de la zona registraron en la última semana 7 siniestros, tres de ellos graves

28 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

En esta última semana, desde el 21 de diciembre, las carreteras de la Costa da Morte han registrado al menos siete accidentes de tráfico, tres de ellos de gravedad. Tal registro supone que la comarca está viviendo la Navidad con más siniestros de los últimos cinco años. Así, si bien tanto en el 2012 como en el 2013, 2014 y 2015 hubo choques, no se alcanzó la situación, en número, de este 2016. Sin embargo, sí hubo que lamentar la muerte de dos jóvenes.

En la Navidad de este año, el suceso más grave tuvo lugar el día 21 en la AC-419, a la altura de Tella (Ponteceso). Falleció Adrián Mira Varela, de tan solo 19 años, después de haber perdido el control de su vehículo e impactar contra otro coche -con dos personas a bordo, heridas leves- y, finalmente, contra el cierre de una casa. Al día siguiente, viernes 22, dos personas resultaron heridas en sendos accidentes en Muxía y Carballo. En la primera localidad, el siniestro ocurrió en Merexo, con dos camiones implicados que impactaron de frente. Uno de los conductores tuvo que ser excarcelado por los bomberos ceenses. Mientras, en Carballo, fue en Cances donde impactaron también frontalmente dos vehículos, resultando herido un joven de 26 años.

Menos de 24 horas después de estos accidentes, una joven resultaba herida cerca de Fornelos (Baio) a consecuencia de un atropello en la AC-430, que une la localidad baiesa y el lugar de As Grelas (Cabana). Sufrió varios traumatismos y fracturas a causa del golpe -el parabrisas del vehículo quedó destrozado-, por lo que fue atendida en el lugar por Urxencias Médicas y, después, trasladada en ambulancia al Virxe da Xunqueira de Cee.

El tercero de los accidentes más aparatosos ocurrió anteayer, lunes, a primera hora de la mañana en Dumbría. Tres personas resultaron heridas, dos de ellas de carácter muy grave, tras una colisión en la AC-552: se vieron implicados un camión que transportaba bombonas de butano y un BMW. Ambos conductores tuvieron que ser excarcelados por los bomberos de Cee: de hecho, el hombre que manejaba el turismo quedó inconsciente y fue trasladado en helicóptero al Hospital de Santiago. También este pasado lunes, una mujer resultó herida leve tras volcar su vehículo en una colisión ocurrida en la AC-413, la carretera que enlaza Carballo y Ordes, a la altura de la localidad de A Silva (Cerceda). Finalmente, a las 14.02 horas de ayer, se alertó al 112 por un atropello en la rúa Compostela carballesa. Fueron movilizados Urxencias Médicas, Protección Civil, Policía Local. En principio, la víctima no revestía gravedad.

Buena parte de los siniestros de estos días han tenido lugar en carreteras comarcales, a la altura de núcleos eminentemente rurales. «Tenemos carreteras secundarias en mal estado y peligrosas, a las cuales tenemos que adaptar nuestra velocidad», dice Jeanne Picard desde Stop Accidentes. Recuerda, por otra parte, que los jóvenes que viven en estos ámbitos no tienen otra forma de desplazamiento para divertirse («algo a lo que tienen derecho») que no sea el coche, por lo que conmina al Gobierno a hacer un esfuerzo y habilitar taxis compartidos u otras formas de desplazamiento seguras para la juventud.

En el 2015, en este tiempo navideño, tan solo trascendió un accidente, en el que se vio implicado un joven de 19 años tras haberse salido de la vía en Brandomil. También un 21 de diciembre, como en el caso de Adrián Mira, falleció un joven de 26 años. Ocurrió en el 2014, de madrugada: el coche que manejaba David Pérez chocó con un camión a cuatro kilómetros de su casa. En el 2013, la Navidad dejó un accidente de escasa consideración en la Costa da Morte, aunque tan solo unos días antes, el 19 de diciembre, falleció la joven Lara Sánchez, en la subida de O Carrizal, ya cerca de Agualada. En el año precedente, el 2012, hubo dos accidentes, sin daños personales.