Mar de Fábula retiró un centenar de sacos de plásticos de Baldaio

Á. palmou CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO MUNICIPIO

José Manuel Casal

La jornada de limpieza celebrada ayer por el colectivo reunió en el arenal a 78 voluntarios

26 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La playa de Baldaio fue el escenario en el que se desarrolló ayer una de las limpiezas que de forma periódica -una vez al mes aproximadamente- viene realizando en la Costa da Morte el colectivo Mar de Fábula, pero no fue una más. Los 78 voluntarios que se sumaron a la iniciativa la convirtieron en la más exitosa de las celebradas hasta la fecha por la entidad y permitieron completar con un balance «francamente positivo» la ambiciosa tarea de recorrer el enorme arenal carballés a la caza y captura de residuos.

«O Concello xa se ocupa de limpala por iso nesta ocasión non atopamos botellas de cristal ou outros residuos que si se ven noutros arenais, pero o noso obxectivo era outro: eran os restos de plásticos, que son, precisamente, os máis perigosos porque son os que comen os peixes e os que entran na cadea alimenticia», explicaba al término de la jornada Xosé Manuel Barros, uno de los responsables de Mar de Fábula. «Por cada plástico pequeno que recollemos estamos salvando un peixe». Y fueron muchos los peces salvados ayer en Baldaio, puesto que el trabajo desarrollado durante dos horas por los voluntarios permitió llenar casi un centenar de sacos de tamaño mediano.

Barros detalló que 34 de esos sacos correspondieron a lo que denominan «contaminantes específicos», y entre los que encuadran desde elementos de bateas hasta tapones de plásticos, pasando por etiquetas y bastoncillos de algodón, residuos estos últimos a los que la entidad está realizando un seguimiento especial. Desde Mar de Fábula se han propuesta examinar el alcance de la presencia en el mar de estos residuos con el objetivo de concienciar a la población de la necesidad de modificar sus hábitos y no desecharlos a través del inodoro. «O mar está moi contaminado así que aínda que limpemos a praia volve a encherse de residuos. Por iso o importante é cortar as fontes de contaminación na súa orixe». Barros contó que ayer también encontraron en una «cantidade moi importante», aplicadores de tampones, lo que confirma la necesidad de campañas para que la población cambie sus conductas. Los 59 sacos restantes portaban restos de redes y todo tipo de plásticos, especialmente de pequeño tamaño.

La iniciativa de ayer fue desarrollada con la colaboración del Concello de Carballo y de Protección Civil y el apoyo de la Fundación Biodiversidade y de Decathlon. La cadena de establecimientos deportivos puso un autobús a disposición de los organizadores y entre los participantes en la limpieza estaban algunos de sus empleados de A Coruña y Ferrol. También se sumaron a los trabajos de ayer varias familias con niños (12 en total).

Mar de Fábula dividió a los participantes en dos grupos. El integrado por niños y personas con dificultades de movilidad fue en autobús hasta Razo y centró sus trabajos en esa zona, mientras que el otro inició la limpieza en el aparcamiento de Baldaio y fue caminando por la playa hasta reunirse con el primero. Los participantes evitaron la zona de dunas y se concentraron en la línea de la marea.

Álvaro Barros dio la bienvenida a todos ellos explicando la importancia de Baldaio y de la labor que iban a realizar y pronunció también unas palabras de agradecimiento dos horas después, cuando hubieron completado la limpieza. Un pícnic en la zona de Razo puso el punto final a una jornada en la que las condiciones meteorológicas también fueron propicias.